Aunque tras la adquisición de Skype por parte de Microsoft surgieron dudas sobre el futuro del desarrollo de la aplicación para Linux, la compañía de Redmond está cumpliendo con el sistema del pingüino y acaba de aparecer Skype 4.1.
Por el momento no se puede hablar de ninguna novedad, pues la lista de cambios no ha sido publicada y lo que muestra la página web oficial como novedades es lo mismo había, relativo a su anterior versión, la 4.0, lanzada el pasado junio.
Pero, al menos, el desarrollo de Skype para Linux continúa y, de hecho, lo hace a una velocidad bastante más decente que en la última época pre-Microsoft. Quién lo diría.