El bigote a través de la historia ha sido considerado símbolo de hombría y virilidad, pero también era indicativo de clase, sabiduría, autoridad o poder según el momento y la sociedad donde se le ubique.
Según lo publicado en el portal dosisdiaria.es, estos “pelos” que retoza en la cara masculina puede ir acompañado de barba y/o patilla según las preferencias del usuario, en algunos casos sirven para cubrir defectos en la piel o cicatrices, como quiera que sea, para lucirlos apropiadamente es necesario proveerles de suficientes cuidados.
Si la opción es dejar crecer el bigote y otros pelos faciales, se deberán tener en cuenta ciertos aspectos como el diámetro del rostro, el grosor de los labios, el tamaño de la boca o de las mejillas. Es por lo tanto importante tener una visión general del rostro para ver cuál es la mejor opción.
Para determinar qué es lo apropiado, lo mejor es recurrir al espejo para observar cual estilo es el idóneo o para descartar toda intención de cambio.
Tanto el bigote como la barba forman parte del estilo de cada uno de nosotros, siendo necesario diferenciar entre lo que es un estilo desaliñado a un estilo cuidado, asociado a una determinada manera de lucir no sólo la ropa o los complementos, sino también el propio cuerpo, porque hasta la “barba de 3 días” requiere de cuidados para que luzca limpia y delineada.
Ten en cuenta si te vas a dejar bigote, recortarlos cada tres semanas en promedio, para que no pierdan atractivo y si no te gusta lucir las canas en tu rostro puedes teñirlas, para lo cual el mercado ofrece gran gama de productos, tanto de origen natural como sintético.
Recuerda que el rostro es nuestra primera tarjeta de presentación, no permitas que olvidos o descuidos afecten la imagen que das a los demás.