En la historia reciente de Estados Unidos hubo tres tiroteos que se cobraron la vida de decenas de personas de origen latino. Uno de ellos, el más fatal hasta ahora, es el único que fue dirigido específicamente contra la comunidad de origen hispano.
¿Fue el tiroteo de este fin de semana en El Paso el ataque más mortífero sobre la comunidad latina en Estados Unidos?
El perpetrador del crimen, identificado por las autoridades como Patrick Crusius de 21 años, llevó a cabo su ataque en esta ciudad de Texas fronteriza con México en la que 8 de cada 10 habitantes son de origen hispano.
Un «manifiesto» atribuido a Crusius decía que ellos, los latinos, eran su objetivo letal.
El balance de su masacre fue escalofriante: murieron al menos 22 personas, de las que 19 tenían origen latino. 8 incluso eran de nacionalidad mexicana.
Su atentado es hasta ahora el más letal de la historia moderna de Estados Unidos que se haya perpetrado directamente en contra de la comunidad latina, formada en este país por unos 55 millones de personas.
Pero no fue el único en el que murieron decenas de víctimas de origen hispano.
En las cuatro décadas pasadas hubo ataques en contra de grupos diversos en los que decenas de latinos resultaron muertos, como fue el caso del tiroteo en una discoteca de Orlando en 2017.
Sin embargo, ninguno se había dirigido específicamente contra los miembros de este sector de la población en Estados Unidos.
«Estamos viendo en Estados Unidos, como en otros países, un sentimiento antiinmigrante junto a un incremento del nacionalismo blanco y supremacismo», advierte Brian Levin, director del Centro de Estudios sobre el Odio y el Extremismo (CSHE, por sus siglas en inglés) de la Universidad Estatal de California.
«Desde que la migración es el asunto número uno para el electorado (de Estados Unidos), y hay un montón de conversación al respecto sobre la población latina, hemos visto un incremento en los crímenes de odio contra los latinos», explica a BBC Mundo.
Tras el tiroteo en El Paso y otro en Ohio ocurridos en menos de 24 horas, el presidente estadounidense Donald Trump urgió al país a condenar «con una sola voz el racismo, el fanatismo y el supremacismo blanco».
Sin embargo, analistas como Levin aseguran que hay una correlación entre el discurso que radicaliza posturas, como el referente a la migración de origen latino que ha abanderado Trump, y la incidencia de ataques de odio en el país.
En opinión de estos expertos, casos en el pasado así lo han demostrado.
3 tiroteos con latinos como víctimas
72 horas después de la masacre, las autoridades tenían un conteo de 22 personas asesinadas en El Paso. 13 tenían ciudadanía de Estados Unidos, e los que 11 eran de origen latino.
Ocho de las víctimas fueron identificadas por el gobierno de México como ciudadanos de su país, y otro de los fallecidos era alemán.
Este es el peor atentado contra latinos en Estados Unidos al ser el objetivo específico de un atacante.
En el tiroteo de 2017 en la discoteca Pulse de la ciudad de Orlando, Florida, murieron 35 personas de ascendencia latina. Pero en ese caso el objetivo manifiesto fue la comunidad LGBT.
Otro tiroteo con un número similar de latinos muertos al caso de El Paso ocurrió en 1982 y se le conoce como la «masacre del McDonald’s».
Un hombre abrió fuego en el interior y exterior de un restaurante en San Ysidro, California, localidad ubicada en la frontera con México, con un saldo de 21 muertos.
De ellos, 19 eran latinos, entre mexicanos y mexicano-estadounidenses.
¿Están los latinos en la mira?
Un reporte publicado el pasado 30 de julio por el CSHE documenta cómo los crímenes de odio aumentan al mismo tiempo que las posturas extremistas ocupan el centro del debate en Estados Unidos.
Como crimen de odio se entiende un delito -como ejercer violencia, discriminación o hasta la comisión de un homicidio- que está motivado «total o parcialmente» por el prejuicio del agresor.