El número de víctimas mortales por el paso del ciclón Idai por Mozambique se elevó a 446 personas, dijeron las autoridades el domingo.
Alrededor de 110.000 personas están en campamentos más de una semana después de que el potente meteoro tocase tierra en el país del África oriental, señaló el ministro de Medio Ambiente, Celso Correia. A medida que las operaciones de rescate van llegando a su fin, los trabajadores humanitarios se preparan para la propagación de enfermedades en la vasta región.
“Seguro que tendremos cólera”, añadió Correia, aunque por el momento no se ha confirmado ningún caso.
Sebastian Rhodes Stampa, vicedirector de operaciones humanitarias de Naciones Unidas, dijo que la magnitud de la devastación era “extraordinaria” no solo por el ciclón y las inundaciones, sino por el hecho de que la tierra ya estaba saturada de agua por las precipitaciones anteriores.
Hasta Mozambique se desplazaron un gran número de efectivos de ayuda, dijo Stampa. “Ningún gobierno en la vida puede responder solo en estas circunstancias”, agregó.