Scarlett Johansson enfurece a los palestinos con un contrato publicitario

La actriz Scarlett Johansson firmó un acuerdo publicitario con la compañía SodaStream para ceder su imagen en la promoción de sus productos.

Desde ahí nada raro, puesto que la estrella de Hollywood es la protagonista de numerosas campañas. El problema llega cuando la citada empresa radica su sede en un denominado territorio ocupado por Israel en Cisjordania. Algo que enfureció notablemente a las autoridades palestinas.

Scarlett Johansson es una de las estrellas de Hollywood más conocidas en la actualidad. Así que no resulta extraño que su imagen sea muy cotizada para multitud de marcas comerciales. En manos de sus representantes está seleccionar los contratos que más se adecúan a su carrera.

Aunque uno de ellos parece haberse pasado dicha criba. Concretamente con una nueva campaña para la empresa israelí Sodastream.

Algo que granjeó a Scarlett Johansson una campaña de boicot por parte de una agrupación de entidades pro-palestinas que buscan bloquear cualquier tipo de colaboración con empresas, organismos o instituciones que tengan intereses comerciales en las colonias israelíes en “suelo ocupado”.

En concreto Scarlett Johansson promociona un pequeño electrodoméstico para poder fabricar bebida gaseosa en casa. El problema llega cuando la factoría de fabricación se encuentra en el asentamiento israelí de Maale Adumin.

El primer spot “de la discordia” se estrenará en la próxima Superbowl 2014, la cual tendrá lugar el 2 de febrero.

Colaboración surgida en defensa del planeta

Lo más curioso es que la colaboración entre Scarlett Johansson y SodaStream surgió con fines ecologistas, puesto que la actriz es usuaria de dichos productos durante años. Ya que además de un aparato para generar bebidas gaseosas, también fabrica depuradoras de agua con el fin de evitar la generación de miles de toneladas de residuos procedentes de botellas de plástico.

SodaStream afirma que en su planta da empleo de calidad a más de 400 personas procedentes de Cisjordania, así como a otras 300 de Jerusalén este, con lo que estaría generando empleo a la muy deprimida masa social palestina.

Aunque por otro lado el movimiento de boicot afirma que la empresa se ubica en territorios ocupados con el fin de obtener un notable ahorro económico en impuestos.

Ya se habla de un serio resentimiento de la imagen pública de Scarlett Johansson en los Estados Unidos. Hace meses se hablaba incluso de una posible carrera política que por ahora está en el aire por esta decisión comercial.

[Fuente: objetivofamosos.com]