Los sonidos de tambores, caracolas y ocarinas resonaron hoy en el centro de Madrid para agradecer a los dioses la llegada de la Nueva Era Maya, en un ritual ancestral bendecido con incienso de copal y amenizado por las danzas del grupo mexicano Guerreros de Luz.
La céntrica Plaza de Colón de la capital española acogió el evento, organizado por la Oficina de turismo de México en España, al que asistieron tanto españoles como visitantes.
Los danzantes, ataviados con penachos (coronas) de plumas de colores y trajes que representaban animales, dieron la bienvenida a una nueva etapa para la humanidad y desmintieron que los mayas predijeran el fin del mundo.
La civilización maya, que dominó el área de Mesoamérica (suereste mexicano y Centroamérica) unos 2.000 años antes de Cristo, desarrollaron exactos y sofisticados mecanismos de medición del tiempo, en los cuales fundamentaron su cosmovisión.
Por medio de las matemáticas, la física y la astronomía establecieron su relación con la “madre tierra”, el cultivo del maíz, y la creación del universo, el mundo y la humanidad.
Para dar un mayor realismo a la ceremonia celebrada hoy en Madrid, además de los bailes tradicionales, el pintor argentino Eduardo Relero colocó en el suelo una pintura realizada mediante anamorfosis (técnica óptica para engañar a la vista) que parecía situar al que la pisaba en medio de una ciudad maya.
A las 12:00 horas (11:00 GMT), coincidiendo con el horario en el que los mayas pronosticaron el cambio de era, los danzantes, ayudados por los asistentes, crearon “una puerta” con una fila de hombres y otra de mujeres, con el fin de “formar la energía masculina y femenina”.
Para agradecer a los dioses y hacer el saludo a las “siete direcciones”, quemaron incienso de copal y lo enfocaron hacia los cuatros puntos cardinales, además de hacia el cielo, la tierra y el corazón.
“Queremos poner nuestro granito de arena, dando el saludo y el permiso a las siete direcciones, hermanándonos con los más de 5.000 danzantes que se reúnen hoy en Chichén Itzá (ciudad maya en el estado mexicano de Yucatán)” explicó a Efe Karla López, miembro del grupo de danza.
Para los asistentes, el espectáculo aclaró que lo que hoy termina es el calendario maya de la presente era, y no el mundo.
Mari Carmen, vecina de Madrid, asistió con su marido porque “teníamos muy presente el fin del mundo, llevo meses oyendo que se acaba el mundo aunque hace poco supe que era un cambio de era. Me enteré del espectáculo y quise ver qué hacían”, explicó a Efe.
Tampoco los turistas quisieron perder la oportunidad de presenciar los rituales mayas en Madrid.
Rafael, colombiano de 31 años de visita en la capital española, indicó a Efe que no confió en los rumores y leyó diferentes tesis sobre la profecía.
“Ya la NASA dijo que no era cierto que se acabara el mundo hoy, pero me parece muy bien que se aproveche la oportunidad para mostrar una cultura como la maya”, dijo.
Por su lado, los organizadores del evento aprovecharon la espectación para explicar la profecía.
“Hoy no se acaba el mundo, los mayas en ningún momento dijeron que fuera así. Se acaba el calendario de la Cuenta Larga (5.125 años) y comenzamos el sexto sol en un nuevo ciclo galáctico”, explicó a Efe Javier Aranda, Director regional para Europa de la Oficina de turismo de México.
El calendario de la Cuenta Larga, un sistema para registrar el tiempo en forma lineal, combinado con el ritmo cíclico, ha resultado ser el más polémico de los mecanismos de medición desarrollado por los mayas.
Para Aranda, la rumorología creada alrededor de las previsiones mayas ha sido una oportunidad para promocionar el turismo en su país y mostrar esa cultura al mundo.
“Esperamos que suba el turismo en la región, la idea de la campaña es aprovechar el momento de inquietud creado en la cultura occidental y alzar la cultura maya a la altura de la china o la egipcia”, concluyó.
[Agencia: EFE]