Imágenes desgarradoras: La historia de una madre y su hijo con cáncer

«A mother’s journey», título del reportaje, se compone de una serie de cuatro artículos, que relata los últimos cuatro meses de vida de Derek, esto gracias a las imágenes de Renée y el texto de Cynthia Hubert, periodistas del diario The Sacramento Bee, en Californiana, Estados Unidos.

Derek tenía tan sólo 10 años de edad cuando fue diagnosticado con neuroblastoma, cáncer infantil. Su madre, Cyndie French, sola y con cinco hijos, enfrentó la situación y decide que sea documentado por Renée C. Byer y Cynthia Hubert.

Seis meses después de la noticia, en mayo del 2005, Cyndie se pone en contacto con las periodistas para pedirles que estén presentes en el desarrollo de la enfermedad de su hijo. Ellas vivieron, junto con la familia y amigos, la desesperación, impotencia y esperanza de cada día, en la casa, en la calle, las visitas al doctor, transfusiones sanguíneas, cirugías, terapias…

La serie de fotos que publicó Renée C. Byer, son una muestra del impacto de tiene una enfermedad de este grado de complejidad, no sólo en el paciente, sino en toda la familia.

Cyndie tuvo que vender su negocio, se vio obligada a desatender a sus demás hijos, al grado de mandar a su hija menor a vivir con su padre e incluso, uno de los hijos mayores abandonó la casa tras una fuerte discusión.

El contraste de la vida se ve reflejado en el dolor, la angustia, la rabia, la desesperación e impotencia, así como el coraje, el amor, la devoción, la fe y la valentía, que Cyndie French y su hijo Derek, sintieron y que la fotógrafa Renée C. Byer plasmó en cada una de las fotos.

El proceso duró un año. Derek murió a los 11 años, el 10 de mayo del 2006. Pero su enseñanza de vida, se quedó para la posteridad en la serie de imágenes aquí.

Cyndie French comentó los motivos que la impulsaron a hacer público todos los momentos que vivió su familia al tratar de sobrellevar el cáncer de Derek, «Sentía que era importante mostrar a la gente qué ocurre realmente detrás de todo esto y no esconderlo bajo la ilusión de que todo está bien y de una apariencia de normalidad».

La periodista Renée C. Byer, tras recibir varios premios y reconocimientos por su trabajo, declaró «Como fotoperiodista me esfuerzo en buscar historias que ayuden a sensibilizar sobre los menos favorecidos. Era importante contar ésta (historia) porque se invierten millones de dólares en la investigación del cáncer, pero apenas nada en ayudar a las familias que se enfrentan al sufrimiento emocional y financiero que supone tener un hijo con un tumor terminal». Así lo publica elmundo.es.

Renée afirma que la experiencia que vivió al realizar este trabajo fue inigualable: «Fue un regalo que me permitieran estar allí. Durante todo el proceso, y debido a los momentos de los que fui testigo, tuve la visión de que podría llevar esperanza a otras familias».  Menciona 20minutos.es.

La fotoperiodista Renée C. Byer, cuanta con más de 20 años de experiencia en la industria de los medios de comunicación masiva.

Es una reconocida fotógrafa, diseñadora y editora gráfica, que ha sido galardonada en varias ocasiones por su trabajo, por la National Press Photographers Association, Society of News Design y Associated Press.

Con la serie de fotos de biotecnología titulada «Seeds of Doubt», ganó el Harry Chapin Media Award, en 2005. También obtuvo el primer lugar en fotoperiodismo de la National Press Photographers Association.

En el mismo año, pero con las imágenes «Women at War», fue galardonada con el Premio del Presidente de McClatchy. Desde el 2003, Renée C. Byer ha trabajado en The Sacramento Bee, pero anteriormente laboró en Seattle Post-Intelligencer.

Sin embargo, su pasión por capturar la vida de las personas, como parte de su profesión, la han llevado a estar en diversos medios de comunicación, de gran renombre en Estados Unidos.