Standard & Poor’s rebajó el viernes la calificación crediticia de Venezuela, tras implementar una nueva metodología de medición que da más peso al riesgo político, variable que considera un punto débil sobre la solvencia del país petrolero.
La agencia redujo la calificación de la deuda a largo plazo a "B+" desde "BB-" y dejó el panorama estable.
El riesgo político ha sido un tema constante en Venezuela, donde son comunes cambios en las reglas económicas y nacionalizaciones de empresas. La incertidumbre en torno a la salud del presidente Hugo Chávez se ha sumado a estos riesgos, dijo S&P en un comunicado.
"En nuestra opinión, cambios y leyes arbitrarias, controles cambiarios y en los precios y otras medidas económicas distorsionadoras e impredecibles han socavado la inversión del sector privado y perjudicado a la productividad -debilitando la economía de Venezuela", escribió en un informe el analista de S&P Roberto Sifon Arévalo.
Las vastas reservas de gas y petróleo de Venezuela de alguna manera contrarrestan esta incertidumbre política, agregó la agencia.
Aunque S&P espera que las reservas internacionales de Venezuela continúen respaldando un constante superávit de cuenta corriente, informes de que Chávez planea repatriar las reservas monetarias y de oro del país "agregan incertidumbre sobre el nivel verdadero de esas reservas", dijo S&P.
[Fuente: El Mundo]