El servicio de almacenamiento de archivos RapidShare anunció que despedirá 45 empleados, un 75% de su plantilla. Con esta decisión, RapidShare espera poder hacer frente a la grave crisis que está atravesando desde hace dos años.
El CEO de RapidShare, Kurt Sidl, declaró: “La medida se toma, sin duda, para que podamos reducir los costes y por desgracia tenemos que desprendernos de un número de empleados. RapidShare seguirá manteniendo el servicio y tiene planes concretos para el futuro”.
Los problemas de RapidShare comenzaron después de ser etiquetado como un “sitio de delincuentes” por el Gobierno de Estados Unidos en 2011. El servicio de alojamiento de archivos se ha gastado medio millón de euros en procesos judiciales en EEUU para tratar de salvar su reputación, según se desvela en Tech Investor News.
Según Itespresso.es, Rapid Share tras su lanzamiento en 2004, el rápido crecimiento llevo a la compañía a convertirse en uno de los sitios de alojamiento de archivos más grandes en Internet. Como sucedía con Megaupload, RapidShare era un espacio donde los usuarios podían almacenar contenidos con copyright y compartirlos con otros internautas.
Las acusaciones de las empresas dueñas de los derechos de esos contenidos enzarzaron a RapidShare en múltiples batallas legales. Esto dañó su imagen, lo que unido a la competencia de sitios más eficaces como Depositfiles o Freakshare, ha llevado a los usuarios de RapidShare a cancelar sus cuentas y abandonar el servicio, provocando una fuerte crisis en la compañía. RapidShare lucha ahora por encontrar un nuevo camino que la recupere de la pérdida de usuarios.