Youtube podría hacer feliz al surcoreano Park Jae-Sang de 34 años, por dos motivos: Está a punto de ser millonario sólo con las ganancias que le significaron los más de 800 millones de visitas a su video y ya le arrebató el récord de visitas histórico al púber Justin Bieber.
Si, no se enojen, hablamos del padre del Gangnam Style, el coreano PSY, a quien vemos hasta en la sopa, pero que gracias al fenómeno que produjo su lisérgico pasito, sólo de anuncios de YouTube, su videoclip ya ha recaudado US$870.000, lo que sumado a las ventas de su tema por iTunes, a un humilde US$1,29 por descarga, podría llegar a los US$8 millones en pocos días.
Pero, como afirma el refrán, nadie es profeta en su tierra. El cantante PSY está a punto de convertirse en millonario sólo por lo que gana a través de Youtube, y ha ganado dinero de sobra a través de iTunes, pero muy poco de ese dinero proviene de su país, Corea del Sur.
El análisis de ganancias estimadas para el artista fue realizado por la agencia The Associated Press con información pública y cálculos del sector. En Corea del Sur obtendrá menos de US$60.000 por descargas de su canción por internet. En Estados Unidos ha sido descargado 2.7 millones de veces y ha estado en el puesto número uno y en el segundo puesto casi todas las semanas desde su lanzamiento, según Nielsen SoundScan. De las ganancias obtenidas, a razón de US$1,29 por descarga, Apple se queda con el 30%.
Las 880 millones de visitas a su video, que crecen a diario y se espera que antes del 2013 llegue a las mil millones de visualizaciones, no sólo superaron al 808 millones de veces visto “Baby” del rubio Justin Bieber sino que también le ha hecho ganar cerca de 1 millón de dólares a Google en anuncios comerciales al comienzo del video.
La viralidad de internet también generó coletazos del fenómeno, del cual se cuentan cerca de 33 mil videos relacionados al original.
A nivel visualizaciones, el país con la mayor cantidad de visitas es Estados Unidos, seguido de Tailandia y Corea del Sur. El problema es que, a pesar de haber sido visto tantas veces en su país natal, según comenta el director de Youtube en Seúl, “las cuotas de anuncios varían dependiendo del país en que se reproducen. Por este motivo, en países en desarrollo los videos ganan mucho menos que en países desarrollados”.