Una vez más, el servicio de mensajería instantánea volvió a estar caído en todo el planeta.
WhatsApp, la aplicación de mensajería más usada del mundo, ha estado caída una hora durante la mañana de este viernes. No te preocupes si veías que tus mensajes no llegaban, o que no te dejaba conectar con tus contactos, no eras el único. Solo tienes que echar un vistazo a las redes para ver que el mundo se ha vuelto loco, de nuevo, por la caída.
Las redes, como siempre que ocurren fallos de este tipo, han vuelto a ser el mejor termómetro para hacerse una idea de la importancia de la caída, y cientos de usuarios han criticado en Twitter el fallo de la aplicación.
Whatsapp!!!!! pic.twitter.com/Lb79YbFwkF
— ANONYMOUS ESPAÑA (@ANONSPAIN2) 3 de noviembre de 2017
¿Por qué ocurren estos fallos?
Según recodaba en su artículo en Teknautas Diego Suárez, CTO de la firma española Transparent CDN, los fallos en este tipo de servicios son más normales de lo que uno pueda imaginar y se deben a todo tipo de problemas. «El estado de internet es mucho más precario de lo que piensa la mayoría», recordaba el especialista.
«Un crecimiento mucho más veloz de lo planificado en la tecnología tiene gran parte de la culpa, pero hay infinidad de factores que afectan a las empresas ‘online’. De fallos técnicos a errores humanos, pasando por catástrofes naturales», comentaba Suárez. «La mayoría de las veces la cuestión no radica en evitar los omnipresentes errores, sino en ser ágil remediándolos y minimizando el impacto de éstos».
La aplicación de el bocadillo verde no es la única que sufre este tipo de problemas sino que todos los gigantes dela redinternet tienen que lidiar continuamente con fallos de este tipo. Aquí van algunos ejemplos de fallos clamorosos.
- Amazon. En marzo de 2017 un error humano al teclear dio al traste con una buena parte de la capacidad de los servidores, lo que se tradujo en horas de caída, decenas de miles usuarios cabreados y cientos de potenciales matches de Tinder perdidos (y corazones rotos). Todo un drama digital.
- Renfe. Cada 25 de mes la web se colapsa por la cantidad de gente que quiere hacerse con la promoción de billetes que ofrece la compañía. Esto provoca continuamente fallos, retrasos y, claro, el enfado de todos los usuarios.
Las soluciones, según comenta Suárez pasan por tener todo por duplicado, mejorar el equipo técnico, cuidar el caché y apostar por servicios como las CDNs. Aunque, como confiesa, no hay una solución definitiva a día de hoy. Así que paciencia y a esperar a que el problema se resuelva.
Facebook, Google, Twitter, WhatsApp…. Todos volverán a fallar inevitablemente puesto que el error, al menos por el momento, viene implícito a la tecnología. No pasa nada. Hemos sobrevivido miles de años sin internet. El mundo no terminará por dos horas sin chistes por Whatsapp. Guardemos el móvil y demos un paseo, alguien ya está trabajando contrarreloj para que podamos seguir dando ‘likes’ en Instagram. Errare humanum est.