El 22 de julio próximo es la nueva fecha informada hoy por el gobierno de Panamá para el reinicio de vuelos comerciales internacionales, por razones de salud pública, según la Autoridad de Aeronáutica Civil (AAC).
El plazo anterior era el venidero 22 de junio y es la cuarta ocasión en que la AAC cambia la apertura del espacio aéreo, desde que cerró sus cielos el pasado 22 de marzo y se mantiene operativo solo para aviones de carga y excepcionalmente, por su carácter humanitario, para traslados de extranjeros varados en Panamá o nacionales en el exterior.
La reapertura de la frontera aérea será pospuesta nuevamente por el incremento de contagios de Covid-19 en el país, adelantó el presidente Laurentino Cortizo el pasado 12 de junio, durante un encuentro con un grupo editorial local.
Entre las áreas capitalinas de mayor contagio en estos momentos está el corregimiento de Tocumen, en las inmediaciones del Aeropuerto Internacional de igual nombre, y otras colindantes en el Este de esta urbe.
Las cifras mostradas por Panamá al llegar ayer a los 100 días de la pandemia son alarmantes y presentan un escenario desalentador por el retroceso en el control de la enfermedad y el aumento vertiginoso de la propagación.
Cuando el total de casos confirmados se aproxima a 22 mil y los 540 nuevos infectados de ayer fue la menor cifra en los últimos seis días, el dato preocupante es que la tasa de trasmisión (Rt) se elevó a 1,58, o sea, cada contagiado podría trasferir el virus a más de una persona.
En cifras absolutas esto representa que cada 16 jornadas se duplica el número de casos y según el comportamiento de la epidemia en el país, el 15 por ciento de los pacientes requiere hospitalización y la tercera parte de estos últimos desarrollan síntomas graves por avanzada edad, enfermedades crónicas o diagnóstico tardío.
El reporte de la pandemia de este martes ubicó en 21 mil 962 el total de confirmados, de los cuales siete mil 731 están activos y 437 fallecieron.
Las dos terceras partes de los infectados tienen entre los 20 y 59 años de edad, mientras el 77 por ciento de los fallecidos eran del grupo etario de 60 a más de 80 años.