El presidente estadounidense, Barack Obama indulta el pavo «Cheese» junto al presidente de la Federación Nacional de Pavos, Gary Cooper y su hijo Cole Cooper
El tradicional indulto presidencial del pavo, que en esta ocasión se llamaba «Cheese» ha supuesto en la práctica el inicio en Estados Unidos las celebraciones de Acción de Gracias, la fiesta familiar por excelencia en la que un año más 46 millones de desplazamientos están amenazados por una tormenta de lluvia y nieve.
Obama, acompañado por sus dos hijas Sasha y Malia, aprovechó la ceremonia para hacer una broma política al referirse a su última gran medida, la regularización por decreto de más de 5 millones de inmigrantes indocumentados.
«Estoy seguro de que (el indulto del pavo) será la acción ejecutiva de la que más se hablará este mes. Hoy, actúo completamente dentro de mi autoridad legal, con una medida que ya tomaron presidentes demócratas y republicanos antes que yo, para salvar a dos pavos, ‘Mac’ y ‘Cheese’, de un destino terrible y delicioso», afirmó Obama en su discurso.
«Si eres un pavo, y tienes el nombre de un platillo, tus probabilidades de escapar de la cena de Acción de Gracias son pocas», dijo Obama. La ceremonia fue realizada bajo techo a causa del frío y las precipitaciones registradas en Washington.
Obama anunció la semana pasada una orden ejecutiva sobre inmigración que generó fuertes críticas republicanas. En tono de broma el miércoles, el presidente dijo: «Sé que algunos lo llamarán amnistía.Pero no se preocupen. Hay suficientes pavos para todos». Más tarde, Obama y su familia llevaron dos pavos a un centro de distribución de alimentos para pobres.
En la ceremonia, Obama se refirió a las noticias que cuestionaron la lógica de la tradición de perdonar la vida a un pavo y dijo que resultaba es un poco desconcertante hacerlo todos los años. Pero agregó que disfruta la tradición, porque «con todas las cosas difíciles que rodean este cargo, es bueno de vez en cuando decir ‘Feliz Día de Acción de Gracias’ y ésta es una buena excusa para hacerlo».
Los presidentes estadounidenses desde Abraham Lincoln hasta la actualidad han estado librando a los pavos de acabar sus días dentro de un horno para posteriormente presidir la dena de Acción de Gracias.
Fuente [Abc.es]