El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, dará el jueves un discurso en el que instará al Congreso a aprobar lo antes posible una reforma migratoria, un asunto que recobró su carácter de prioridad de la Casa Blanca una vez superada la batalla fiscal de este mes.
Obama hará su declaración a las 10:35 hora local desde el Salón Este de la Casa Blanca, según informó la residencia presidencial en un comunicado.
El presidente llamará al Congreso a aprobar una reforma migratoria de sentido común», adelantó la Casa Blanca en un comunicado.
Obama estará acompañado por «una amplia gama de simpatizantes de la reforma migratoria», según señaló a periodistas un funcionario de la Casa Blanca.
Una reforma migratoria «hará crecer la economía, reducirá el déficit y tiene un amplio apoyo tanto de demócratas como de republicanos, de empresas y sindicatos, así como de los líderes religiosos y de las agencias de seguridad», indicó el funcionario.
«El presidente urgirá al Congreso a analizar este asunto de forma bipartidista», agregó la fuente.
El pasado jueves, al resolverse la disputa presupuestaria que mantuvo paralizada la administración durante más de dos semanas, Obama pidió al Congreso centrar su atención en la reforma migratoria, con el fin de aprobar una ley antes de que comience el año 2014.
Tenemos que terminar el trabajo y arreglar nuestro roto sistema migratorio», dijo entonces el presidente estadunidense.
El Senado aprobó su propuesta para la reforma migratoria el pasado junio, pero desde entonces la Cámara de Representantes no ha logrado alcanzar un acuerdo bipartidista sobre el contenido de su texto.
La disposición sobre la seguridad fronteriza es uno de los asuntos más polémicos, ya que los republicanos de la Cámara baja consideran insuficiente lo acordado por los senadores.
La reforma migratoria quedó en un segundo plano para los legisladores en los últimos meses debido a la crisis siria y los asuntos presupuestarios, pero grupos pro inmigración y activistas a lo largo y ancho del país no han cejado durante estas semanas en su labor de seguir presionando al Congreso.
[Fuente: EFE]