Nueva York inaugurará este domingo una nueva estación de metro, por primera vez en 26 años, con la apertura de una extensión de la línea 7, que irá hasta el extremo oeste de Manhattan para dar servicio a un área en plena expansión.
La estación, situada en la confluencia de la calle 34 con la avenida 11, supone una parte clave del proyecto de los Hudson Yards, una de las grandes apuestas urbanísticas de la Gran Manzana.
El objetivo es convertir una zona que durante décadas tuvo un marcado carácter industrial en uno de los nuevos puntos calientes de la Gran Manzana con la construcción de grandes rascacielos y la remodelación del centro de convenciones Jacob K. Javits.
La nueva parada del metro comenzó a construirse en 2007 con un presupuesto de unos 2.400 millones de dólares y se inaugurará con casi dos años de retraso. De entrada se espera que sea utilizada por unos 32.000 pasajeros diarios, una cifra que podría multiplicarse a medida que las construcciones en la zona se vayan completando.
En un espacio dominado hasta ahora por una inmensa instalación ferroviaria, se levantarán en los próximos años miles de viviendas, oficinas y espacios comerciales, y todo a tiro de piedra de algunos de los lugares más transitados del Midtown de Manhattan.
La nueva estación, bautizada 34th Street-Hudson Yards, será abierta al público el domingo por la tarde, tras un acto de inauguración en el que participarán autoridades como el alcalde Bill de Blasio.
La parada estará servida por la línea número 7, que conecta Queens con Manhattan, y que hasta ahora terminaba su trayecto en Times Square. EFE.