Pareciera que a Caracas quienes manejan los recursos que le corresponden por ley y pueden hacer algo por ella, no se preocupan por priorizar y resolver los enormes problemas que padece La Sultana del Ávila. No hay derecho que nuestra ciudad capital haya recibido los 447 años de su fundación inundada de basura y mal oliente, sus calles y avenidas en los sectores populares y urbanizaciones están destrozadas por los huecos que parecen la cara oculta de la Luna. Igualmente con una inseguridad que está matando a los ciudadanos, con una taza crímenes que sobrepasa los cinco mil muertos por año.
Soy monaguense de pura cepa, nacido en Caicara de Maturín, pero hijo adoptivo de la Sultana del Ávila, donde llegue el mes de septiembre de 1970 con el sueño y la esperanza de ser periodista. En esos momentos gran parte de Venezuela era rural, y Monagas no era la excepción, con pocas oportunidades para estudiar, y Caracas no solo me dio la oportunidad de ser profesional, que en ella vi nacer y crecer a mis hijos, graduarse como profesionales, casados y con hijos que son mis nietos, a quienes quiero adoro y por los cuales lucho para que tengan un país mejor que el recibido de mis padres y mis abuelos.
Volviendo a la realidad de Caracas y sus gerentes que la maltratan, debemos hacer la salvedad sobre la actuación del Alcalde Metropolitano de Caracas, Antonio Ledezma, quien desde el mismo año 2008 cuando gano limpiamente con mas 100 mil votos de ventaja, ha tenido que enfrentar una persecución y despojos de recursos por parte del gobierno nacional, quien nunca aceptó la derrota que le propinaron a Aristóbulo Isturiz. Lo primero que hicieron los chavistas fue invadir la sede principal de la Alcaldía Metropolitana y otras dependencias, pero además aprobaron una ley inconstitucional para quitarle el 98% de los recursos.
Pero Antonio Ledezma con los pocos recursos que le dejaron, y los que cuando tiene suerte le pagan las alcaldías menores de Chacao, Sucre, Baruta, El Hatillo y Libertador, además el Gobierno del Distrito Capital y la Gobernación de Miranda, de acuerdo a la ley de dos niveles, ha logrado realizar una gestión que se ve en el Area Metropolitana de Caracas, especialmente en los sectores populares. Con relación a los recursos de la Alcaldía Metropolitana hay que ser sincero, aunque algunas dependencias de las nombradas son menos maulas que otras, todas tienen deudas atrasadas con la Alcaldía Metropolitana de Caracas.
Los recursos que le arrebataron a la Alcaldía Metropolitana se los asignaron a un mamotreto llamado Gobierno Distrito Capital, una copia de lo que era la Gobernación del Distrito Federal, la cual fue eliminada por la Constitución Nacional aprobada el año 1999. La gerente del GDC, Jackeline Farías, además de ser designada a dedo por el presidente de la república y manejar los recursos arrebatados a la Alcaldía Metropolitana de Caracas, también durante todo el año recibe grandes créditos adicionales por parte de la Asamblea Nacional, pero no hace ningún cariñito a la parte del municipio Libertador que le corresponde. Lo de ella es puro activismo político a favor de la mal llamada revolución bolivariana.
Otro que no hace nada por Caracas, es el Alcalde del municipio Libertador, Jorge Rodríguez, quien recibe enormes cantidades de dinero del llamado situado constitucional que le asigna recursos por la densidad poblacional, y por la recaudación de impuestos municipales, pero ese dinero no se transforma en obras para los caraqueños que habitan en el municipio Libertador de La Gran Caracas, la cual recibió el 447 aniversario llena de basura y con mucha inseguridad. El municipio Libertador es el mas sucio y mas violentos. Por cierto, Jorge Rodríguez en 2011 prometió renunciar si no resolvía el problema de la basura.
La Sultana del Ávila, llamada en otros tiempos la Ciudad de los Techos rojos o sucursal del cielo, hoy es una de las ciudades mas violentas del mundo necesita de mucho amor de todos los que la queremos, pero también necesita gobernantes que la quieran y la desarrollen, no que la maltraten.
Por Gerónimo Figueroa