La verdad es que cada día los venezolanos perdemos mas la capacidad de asombro. Resulta que el ministro de Finanzas, Jorge Giordani, el pasado lunes 28 de marzo anunció que en el año 2012, 25 mil millones de dólares entregados por el Sitme para importar productos del exterior, fueron utilizados para traer chatarra y no para lo cual fueron entregados, sin embargo el ministro no dio nombres de los que habrían cometido la estafa contra la nación. Por cierto, sobre esa cadena los venezolanos se generaron muchas expectativas sobre un aumento salarial y lo que anunciaron fue otra devaluación para seguir sacándole el dinero del bolsillo a los venezolanos.
Si el ministro afirma categóricamente que el Sitme fue un fracaso y que sirvió para utilizar los dólares para traer chatarra, también sabe quiénes son esas empresas que recibieron los dólares para importar comida y no cumplieron, el señor Giordani está obligado, y esto lo reafirmamos, está obligado no solo a decir los nombres que deben ser muchos por la asombrosa cifra de 25 mil millones de dólares, sino a publicarla en los periódicos de circulación nacional y regional para que la población los conozca.
En 2010 y 2011, el mismo ministro Giordani a través de CADIVI ordenó publicar a páginas completas en los periódicos, nombres de algunos venezolanos que tuvieron la osadía de gastar algunos dólares sin presentar facturas, que en la práctica no alcanzaron doscientos dólares por persona y cuya suma entre todos los “infractores” no alcanzó a los 7 millones de dólares, lo cual es insignificante si tomamos en cuenta que los cupos asignados para la compra a cada venezolano está por el orden de cuatrocientos a mil dólares anuales.
Estos venezolanos que se atrevieron no a robarse, porque los dólares no son regalados, sino que son pagados a través de la tarjeta de crédito, fueron expuestos como delincuentes al publicar sus nombres en los periódicos. Si tomamos como válida la cuota de mil dólares por persona y la dividimos entre 365 días que tiene el año, podemos afirmar que son dos dólares con diez centavos asignados por día, lo cual es una contradicción con la propaganda del gobierno cuando afirma que ahora PDVSA es de todos los venezolanos.
Cuando se habla de 25 mil millones de dólares, no estamos hablando de conchas de ajo ni de conchas de chicharos, son muchísimos millones de dólares que fueron vendidos en el mercado negro y que ayudaron a disparar el dólar paralelo, con los cuales se hubiesen construido por los menos dos millones de viviendas para las familias que no tienen donde vivir. Igualmente se hubiesen reparado todas las carreteras y puestos pepitos todos los hospitales del país y no esperar a que termine la campaña electoral para que el señor Maduro lo haga, si es que gana las elecciones.
No podemos aceptar ni conformarnos con que el ministro Giordani diga que unos pocos vagabundos desviaron 25 mil millones de dólares, que el señor Maduro diga con la cara muy limpia no saber que pasó, sino que deben publicar sus nombres, abrirles juicio por estafa, incautarle los bienes y meterlos preso. No hay que olvidar, no solo a los compatriotas que fueron expuestos al escarnio público en las páginas de los periódicos, sino que por algo similar metieron preso durante tres años al banquero Eligio Cedeño, pero con la diferencia que el referido banquero regreso los 27 millones dólares, sin embargo, Hugo Chávez lo hizo su prisionero y cuando la Juez María Lourdes Afiuni le dio libertad condicional, inmediatamente Chávez ordeno meterle 30 años de prisión a la juez por haber cumplido con su deber.
Giordani está obligado a decir los nombres de los que estafaron a la nación con 25 mil millones de dólares y si no lo hace, se convierte en cómplice.
Por: Geronimo Figueroa