La festividad que celebra el 25 de diciembre el nacimiento de Jesucristo, es definida por diferentes opiniones en célebres frases.
Para el trigésimo presidente de Estados Unidos, John Calvin Coolidge la Navidad no es un momento ni una estación, sino un estado de la mente. Valorar la paz y la generosidad y tener merced es comprender su verdadero significado, opinaba. Fue él quien inició en 1923 en su país la ya tradicional ceremonia de iluminación del árbol navideño.
Otro norteamericano, el abogado, escritor y docente Hamilton Wright Mabie (1846-1916), en el mismo año expuso que la fecha bendita que une a todo el mundo en una conspiración de amor.
La Navidad no es una fecha. Es un estado de la mente, sostenía la estadounidenses Mary Ellen Chase (1887 – 1973), calificada como una de las más importantes figuras de la literatura regional de principios del siglo XX. Escribió más de 30 libros.
Al igual que la cena navideña, la misa de medianoche, mundialmente es manifestada en el villancico (canto así denominado porque su interpretación por habitantes de las villas:villanos) Noche de Paz que en opinión de William Studwell, experto en ese ritmo es el símbolo musical de la Navidad.
Se trata de un poema de seis estrofas compuesto originalmente en alemán en 1816 por el sacerdote católico austríaco Joseph Mohr, también cantor y músico, entonces joven de 24 años. Dos años más tarde, cuando ejercía en la Iglesia de San Nicolás de Oberndorf, decidió que quería el poema con música y le pidió a su amigo y paisano igualmente joven (31 años) Franz Gruber, maestro de escuela y organista en la iglesia de misma Iglesia que se lo musicalizara. En el invierno del 24 de diciembre de 1818, los dos lo cantaron en la Misa de Navidad. El Padre Mohr, tocaba su guitarra y el coro repetía las dos últimas líneas de cada verso: Brilla la estrella de paz (bis)/ Y la estrella de Belén (bis) /Brilla sobre el Rey (bis) /Y la estrella de paz (bis).
Aunque compuesto por católicos, este villancico ha tenido igualmente un especial significado para las demás iglesias del mundo entero. Para este siglo se contabilizan más de 300 traducciones en varios idiomas y dialectos.
En las conmemoraciones navideñas la solidaridad siempre está presente. Fuera quedan el odio y los resquemores; la reconciliación que hoy imploramos debe estar en vigencia.
Con motivo de la celebración navideña, familiares y amigos de presos políticos y refugiados en otros países hicieron lo que hace veinte años clamaron por el ahora Presidente los defensores de derechos humanos: el beneficio de la amnistía. Es la prioridad ante los inmensos problemas que aquejan a nuestro pueblo. Lo impone el ambiente de Noche de paz, Noche de luz.