Las familias venezolanas destinan la mayor parte de sus recursos a la compra de comida, la cual sufrió una inflación de 79,3 por ciento durante el último año. Aún con el aumento de 10 % que llevó el salario básico a Bs. 3.270, dos remuneraciones no alcanzan para cubrir una cesta alimentaria en Bs. 7.970.
Un sorpresivo aumento de 10 por ciento, que lleva el salario mínimo a tres mil 270 bolívares mensuales, implementó el gobierno de Nicolás Maduro a partir del 6 de enero.
Pero el incremento no le garantiza a las familias el acceso a la alimentación, puesto que dos sueldos básicos aún no bastan para comprar la canasta de productos comestibles.
El ingreso mínimo de un trabajador se ubica ahora en tres mil 858 bolívares, que resulta de la sumatoria de tres mil 270 de salario y 588 de tiques de alimentación.
Una familia que cuenta con las remuneraciones básicas de dos empleados, solo maneja siete mil 716 bolívares por mes, que no alcanzan para adquirir la cesta básica de alimentos.
La canasta alimentaria tiene un precio de siete mil 970 bolívares, de acuerdo con el último informe del Centro de Documentación y Análisis para los Trabajadores (Cenda), correspondiente a noviembre de 2013.
Las familias destinan la mayor parte de sus recursos a la compra de comida, durante el último año se encareció 79,3 por ciento, de acuerdo con los cálculos realizados con base en los últimos datos publicados por el Banco Central de Venezuela (BCV).
De los siete millones 682 mil trabajadores que existen en el país en el sector formal, de acuerdo con cifras del Instituto Nacional de Estadísticas (INE), casi la mitad percibe un sueldo básico (40 por ciento).
Inalcanzable
La insuficiencia del salario mínimo se hace más notoria si se compara con la cesta básica de productos y servicios -que considera los gastos en comida, vestimenta, transporte, educación, entre otros- que se ubica en 15 mil bolívares, de acuerdo con los cálculos más recientes del Centro de Documentación y Análisis Social (Cendas).
El precio de la cesta básica se mantiene en aumento permanente en Venezuela, un país que cerró 2013 con una inflación de 56,2 por ciento, uno de los índices más altos del mundo.
[Fuente: laverdad.com]