Que lamentable que en un país que produce tantos recursos como lo es Venezuela, tengamos que estar inmersos en una campaña “presidencial”, revestida de acciones tan bajas como la creación de lastima para mantener electores; chantajes basados en las mismas promesas incumplidas hace 13 años y condenas perpetuas a los “camaradas” que pretendan pensar o ejercer un liderazgo propio.
Los venezolanos no debemos buscar un líder mesiánico como primer mandatario, simplemente debemos elegir a un hombre justo y solidario. Que no crea que las cosas vienen solas, en que se logran con trabajo y esfuerzo.
Que este claro que no todo el mundo tiene las mismas oportunidades, pero que haga lo imposible por una sociedad de iguales, pero hacia arriba, no hacia la pobreza, ser pobre con honestidad es digno, pero es malo, quien ha dicho que nosotros queremos que nuestros hijos se bañen con tapara, se críen al lado de la cloaca o simplemente no puedan ser libres por el hampa que nos azota.
Necesitamos un Presidente que no promueva la violencia y el odio a través de su discurso, más bien se empeñe en la salud y la educación para todos por igual, como base para el progreso.
Es imprescindible un primer mandatario que vea la política como una oportunidad de lograr transformaciones que beneficien al pueblo, y un compromiso de usar el poder para gobernar y generar bienestar para todos. Los que ejercen este importante cargo deben jugar en equipo encendiendo el esfuerzo colectivo, pero eliminando el paternalismo a los flojos y a los vagos, quien mas trabaje debe obtener más progreso.
El próximo presidente debe estar convencido de que los problemas de los venezolanos se resuelven en Venezuela, que debe evitar la injerencia de cualquier país y mucho menos de los asesores-dictadores de cualquier parte del mundo, que no les importa un carajo que la gente viva en la miseria, mientras ellos se mantengan en el poder.
Tenemos un país con más futuro que pasado, es necesario enmarcarnos en un plan de crecimiento para Venezuela y los venezolanos. El plan es ponernos todos de acuerdo, sin importar si pensamos diferente, y trabajar juntos en la solución de los problemas. El plan es que construyamos juntos una patria de todos y para todos, sin beneficiar a unos para perjudicar a otros. El plan es luchar por el derecho que tenemos todos a una vida mejor.
Hay quienes construyen cercas para separarnos, juntos debemos derribarlas a través de la activación, entusiasmo y movilización de un equipo para la divulgación del proyecto para todos.
Los gobiernos pasan y los problemas de la gente quedan intactos, un país es imposible que se desarrolle cuando todo gire alrededor del estado anímico, de salud o caprichos del gobernante, esta bueno.
Elijamos con conciencia y dejémonos de pendejadas pensando en pajaritos preñados. El actual gobierno –como todos los que pasaron- ha hecho algunas cosas buenas, pero el pésimo tratamiento al complejo tema de la inseguridad, el auspicio a la corrupción y la ineficiencia en materia de infraestructura, les dan a los venezolanos la gran posibilidad de premiar o sancionar el próximo 07 de octubre.
Además de las descalificaciones, también comenzaron con la guerra de encuestas, por una parte el ahora astrologo Jesse Chacón, da ganador al actual mandatario con una ventaja inalcanzable y por la otra la gente de Consultores 21pone en la fotografía final a Capriles victorioso; respecto a este tema los únicos que tenemos las verdaderas encuestas somos los electores, es preciso hagamos un ejercicio en nuestra calle, en la vereda, en el caserío, en el pueblo o en la urbanización, y evaluemos solo donde vivimos, sin irnos a otros lados, quienes en tiempos pasados apoyaron a Chávez y quienes hoy día de ese mismo grupo están en contra, evaluemos. De allí se desprende el resultado correcto en la intención de voto, por otro lado, el oficialismo vuelve a colocar el disco rayado: imperio, Estados Unidos desestabilizador, contra-revolución, apátridas, etc… Pura paja.
Por Emilio Guzmán / @Emilio_Guzman