“Mis lecturas del 2011” por Richard Sabogal

Este año fue particularmente pobre en lecturas para mi, de las 71 obras leídas podría reseñar algunas que de alguna manera marcaron o dejaron esas huellas impalpables que dejan los buenos libros o no tan buenos, pero que dejan un sello en nuestro ser. No digo con esto que las obras que no nombre son malas, nada de eso, no soy nadie para juzgar qué libro fue o no bueno. Solo dejaré aquí los libros que mejor puntuación sacaron tras leerlos.

No soy partidario de darle puntuación a los libros, ya bien lo dice el escritor Massiani, los críticos de literatura son unos maricas que no se atreven a publicar nunca. Así que no colocaré preponderancia a ninguna obra, sólo las iré reseñando en el orden cronológico en el que fueron leídas.

Abrí el año leyendo una obra interesantísima, llamada La vida Breve de Oscar Wao, una novela impresionante del autor Junot Díaz, Oscar Wao es un joven dominicano que quiere ser el Tolkien latinoamericano y lleva una vida arrastrada y miserable, inseguro de sí mismo, enmarcada en la dictadura de Rafael Leónidas Trujillo, Wao deberá aprender a enfrentar los miedos y seguir adelante, una obra llena de humor y muy sabrosa de leer, además de ser histórica. Le mereció el Pulitzer en 2008 al autor; Tras la huella del hombre rojo de Lorenzo Mediano, es un libro interesante que plantea de manera novelada la manera como nos formamos en la prehistoria, la forma como el que hoy llamaríamos africano se formó, como las razas se fueron fusionando y conociendo, una obra muy ligera de leer, pero interesante, este autor tiende siempre a escribir este tipo de novelas; Alberto Barrera Tziska, tocó a mi puerta nuevamente con una novela excelente, llamada La enfermedad, esta manera tan particular de retratar la venezolanidad, cosa que no logra con las telenovelas que a criterio propio son espantosas, lo consigue con sus libros, La enfermedad trata de la forma en que un doctor debe plantarse ante su padre que ama demasiado para decirle que tiene una enfermedad terminal, cosa que se le ha hecho fácil toda su vida cuando se lo dice a sus pacientes, paralelo a estas historias se retrata la mujer de servicio, y la secretaria, quien gratuitamente se enrolla en un envió de cartas con un sociópata que persigue al doctor, protagonista de la historia, lo cual le pone un poco de misterio al asunto y hace aun más interesante la trama, esta obra me la leí de un tirón, es excelente.

La historia de la sangre de Douglas Starr es un ensayo muy bueno, que retrata toda la historia de la sangre, desde el sangrado con sanguijuelas hasta los primeros intentos de trasfusión entre una vaca y un humano, el autor tuvo una manera muy ligera de narrar el libro, incluso con un poco de humor, la obra termina hasta el momento en que la sangre se convirtió en un negocio millonario, interesante trabajo; Por los signos de los signos de Luis Britto García, es una obra imposible de clasificar, porque se desgrana en muchos géneros, que van desde la crítica literaria hasta un ensayo político, atraviesa las historias de la literatura a través de obras que han marcado el mundo y trabajos desconocidos para muchos peor que no dejan de ser interesantes. Uno de los mejores trabajos del autor.; Cuando amas debes  partir de Eloi Yague es una novela que forma parte de una trilogía, versa sobre el mundo de un periodista, con el típico retrato del buen periodista divorciado, desaliñado, un poco alcohólico, pero talentoso, algo cliché, peor interesante la narración atrapa, tuve oportunidad de poner en contacto con Eloi, prometió obsequiarme el primer libro, ya que este que reseño es la segunda parte, cosa que jamás se materializó; Naranjas dulces, de Néstor Caballero es una novela que versa sobre la época de las guerrillas izquierdistas en Venezuela y la guerra de la derecha contra ellos, todo contado desde la visión de un niño, con muchísimo humor, con un poco de ternura, con nostalgia, es un libro que deja un buen sabor cuando se termina de leer.; La rotación del zodiaco de Julián Márquez es una novela que gira entre los astros y una Venezuela de los 70 y 80, escrita en 3 estilos distintos, que se complementan, una obra compleja que trata de la vida de un nigromante, de dos hombres que intentan hacer una película de este, de narraciones en primera persona de figuras que han tenido contacto con un talismán milagroso y sobre las opiniones personales hacia los inicios de este nigromante, es una obra que maneja muchos estilos y le llevó más de diez años de trabajo escribir al autor; Blanco Nocturno de Ricardo Piglia, pasó también por mi mesa de noche, una obra compleja, un poco pesada de leer en algunas páginas, que aborda de manera seductora el mundo latinoamericano, asesinatos, algo negra, muy buena.; Verde Alicia de Juan Pablo Fiorenza, es una obra que enmarca un mundo ficticio donde el régimen gira en torno a unas pulseras de colores, la amarilla la llevan los homosexuales, las violeta los violadores, las rojas los asesinos, las verdes los genios, todo esto, deducción que consiguen cuando nacen los bebes, por medio de un examen de sangre donde analizan el padecimiento, Alicia, quien lleva pulsera verde, intentara probar que lo de las pulseras es simplemente un modo de controlar y que realmente el ser humano es lo que quiere ser. Con un final abierto, está entre mis mejores lecturas de 2011.

Daniel Glatauer escribió el libro Contra el viento del norte, trata sobre una pareja que se conoce accidentalmente en internet, la manera como poco a poco se van enamorando hasta finalmente depender mutuamente, giros, tramas con un final sorprendente e iracundo, tiene una segunda parte; El profesor de John Katzenbach es una obra que narra los últimos días cuerdos de un profesor que intenta salvar una chica que fue secuestrada por unos enfermos sexuales, un thriller psicológico donde el autor se mete en la cabeza de los asesinos, de la chica secuestra y del profesor que intenta parecer lucido y esta como una cabra debido a un problema similar al alzhéimer. La mejor obra desde el psicoanalista.

Los renglones perdidos de Dios, de Torcuato Luca de Tena, reseña el interior de un manicomio, protagonizado por una mujer riquísima en cultura y que hace titubear al lector sobre si está o no loca, lo interesante del libro es que el autor logró colarse como loco en un manicomio por 18 días, sólo para conocer en carne propia lo que es la vida dentro de un sanatorio mental.

Cerrando el año leí Largo Hayku para un viaje de Susy Calcina Nagai, una obra interesante que aborda la vida de una pareja que se conoce en medio de la guerra, atraviesan problemas bélicos, familiares, de estatus sociales y terminan en Venezuela, una novela de la vida real, interesante y fácil de leer. Que por fortuna me consiguió la amistad de su autora.

Imposible dejar de reseñar Santuario de Cronos de Rey D´ Linares, su más reciente poemario donde aborda de manera surrealista la poesía, con esa brevedad borgiana que dice tanto.

Espero que sus lecturas hayan sido también sabrosas, que hayan dejado esa sensación de euforia,  tristeza o emoción que se siente cuando cierras la tapa del libro, una vez terminado y lo colocas en la biblioteca o algún rincón, y durante un buen rato rememoras sus personajes o sus historias, esas, son las buenas obras que bien valen la pena volver a leer. Espero este 2012 las lecturas sean mucho mejores.

Richard Sabogal

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