¿La predisposición a sufrir migraña se hereda? Una investigación española viene a confirmar la tesis de que así es, de que la migraña tiene origen genético. Han sido investigadores del Vall d’Hebron Institut de Recerca (VHIR) y de la Universitat de Barcelona (UB) quienen han identificado por primera vez los cuatro genes que predisponen a sufrir cerca del 70% de los casos de migraña más común.
Es el primer trabajo que pone nombre y apellido a estos genesLo han hecho en el marco del primer estudio completo del genoma realizado bajo el liderazgo del Consorcio Internacional de Genética de las Cefaleas. La investigación, que ha comparado las muestras de 5.000 pacientes con migraña y 7.000 sanos, ha permitido identificar los genes MEF2D, TGFBR2, PHACTR1 y ASTN2 que predisponen a la migraña a tener un origen genético, aunque el desencadenante es un factor ambiental como el estrés.
Uno de los coordinadores de la investigación en España, Alfons Macaya, ha significado que el trabajo evidencia por primera vez la tesis sobre el origen genético de la dolencia: "Es el primer trabajo en que ponemos nombre y apellido a estos genes en población básicamente europea". Según Macaya, el mapa genético completo de esta dolencia será algo complejo de conseguir, aunque ya se ha realizado un paso importante en este sentido.
La siguiente meta pasa por investigar los mecanismos moleculares para abrir la puerta a nuevos fármacos y comprender ampliamente el significado práctico del descubrimiento, que proseguirá con una comparación de los genes que predisponen a la migraña en la población americana.
Un dolor que incapacita
La migraña es un tipo de dolor de cabeza que puede llegar a incapacitar a quien lo sufre. Afectaa entre el 12% y el 16% de la población general. Los ataques de migraña son más comunes en las mujeres y pueden durar horas o días.
Los ataques de migraña son episódicos y recurrentes y, cuando ocurren, son extremadamente incapacitantes, teniendo en cuenta que generalmente se asocian a otros síntomas comonáuseas, vómitos e hipersensibilidad a la luz y ruidos.
Quienes lo sufren lo describen como un dolor martilleante o palpitante. Incluso, el afectado puede ver luces centelleantes. Si los ataques ocurren más de dos veces a la semana, se recomienda el uso diario de ciertos medicamentos que actúan como preventivos.