El fabricante chino de componentes Foxconn ha estado en el ojo del huracán los últimos años por presuntas prácticas abusivas en el ámbito laboral. A la empresa incluso se la acusa de ser la responsable del suicidio de varios trabajadores que no podían aguantar la presión.
Recientemente, a la mala fama de este suministrador que monta productos para Apple, ATI, PlayStation o Xbox entre muchos otros, se han sumado problemas en los plazos de entrega debido al aumento exponencial de la demanda en segmentos como los smartphones.
La respuesta de Terry Gou, presidente de Foxconn, a toda esta situación ha sido anunciar un plan por el que Foxconn reemplazará un millón de puestos de trabajo por robots. La cifra es muy significativa si tenemos en cuenta que Foxconn tenía contratados a 1.200.000 empleados en 2011.
Según fuentes externas a la compañía, Foxconn ya habría puesto en marcha 10.000 robots a fecha de hoy y la cifra subiría a 20.000 antes de que acabe el año. Los robots, denominados Foxbots, son fabricados por la propia compañía y se han hecho públicos muy pocos detalles sobre su funcionamiento. Al parecer se trata de unidades similares a las que ya se utilizan en el sector de la automoción pero adaptadas al mundo del ensamblaje de electrónica.
La ‘robotización’ de China
Foxconn ya utiliza robots pero es la primera vez que se anuncia un plan masivo en el que los robots sustituyen completamente al personal humano. La adopción de este peculiar personal podría no ser tan rápida como Terry Gou apunta, ya que cada unidad robótica cuesta entre 20 y 25.000 dólares, tres veces el salario medio de un trabajador de la compañía.