¡Cuidado! Manejar con sueño es tan peligroso como hacerlo borracho

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Todos conocemos los síntomas. Te pesan los párpados y tu visión se vuelve borrosa. Tu cabeza se siente tan pesada que no la puedes sostener y tu barbilla se cae hacia tu pecho. No puedes dejar de bostezar. El diagnóstico es claro para la mayoría de nosotros: tienes sueño.

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Yo sé cómo se siente, cómo se ve y tú también lo sabes. ¿Entonces por qué en muchos estudios se muestra que la mayoría de nosotros hemos conducido con somnolencia y muchos de nosotros lo hacemos de forma regular?

No somos una cultura que toma en serio al sueño. Pensamos que cuando nuestras vidas se vuelven tan ocupadas que no nos alcanza un día de 24 horas, podemos recurrir a tiempo extra eliminando nuestras horas de sueño.

En muchas encuestas realizadas en las últimas cuatro o cinco décadas se muestra una constante disminución en el número de horas que la gente ocupa para dormir. Puedes considerar el aumento en los trabajos por turnos, el incremento de los trastornos del sueño como la apnea obstructiva del sueño, pero cientos de miles de somnolientos conducen un vehículo todos los días.

Este domingo es el Día Mundial en Recuerdo de las Víctimas de Accidentes de Tráfico. Degún la Organización Mundial de la Salud, cada año mueren 1.3 millones de personas y 50 millones sufren daños, en ocasiones discapacitantes, debido a accidentes en vialidades.

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En una encuesta reciente realizada por la Fundación AAA para la Seguridad Vial, un tercio de los encuestados admitió que condujo con sueño en los últimos 30 días. En una encuesta de la Fundación Nacional de Sueño de Estados Unidos (NSF, por sus siglas en inglés) de 2005, el 60% de aproximadamente 1,000 conductores, admitió que había conducido con sueño durante el año anterior, y el 37% confesó que se había quedado dormido detrás del volante.

Educar a la gente sobre los peligros de conducir somnoliento es un paso clave para la prevención, ya que la frecuencia con que se hace es difícil de cuantificar. Primero, porque no existe una prueba estándar para determinar la fatiga del conductor, como la que existe con los conductores ebrios. En segundo lugar: los accidentes que se relacionan con la fatiga ocurren generalmente cuando alguien conduce solo. Finalmente: una característic espeluznante de los accidentes que se relacionan con la somnolencia es que comúnmente son mortales.

Los investigadores descubrieron que un accidente que se debe a la fatiga a menudo no deja marcas de neumáticos ni señales de que el conductor trató de corregir el rumbo del vehículo, como se ven en los accidentes por manejar en estado de ebriedad.

En numerosos estudios se demostró que la somnolencia puede afectar la habilidad para conducir tanto como estar borracho. De hecho, estar despierto durante 20 horas seguidas hace que el desempeño del conductor promedio sea tan malo como el de alguien con un nivel de alcohol en la sangre del 0.08%, actualmente el límite legal.

La somnolencia en combinación con el estado de ebriedad es particularmente mortal. No es ninguna sorpresa que los más propensos a conducir con sueño son los jóvenes, entre los 18 y los 29 años, especialmente los hombres, y es el mismo grupo de edad que participa en el mayor número de accidentes de tráfico. Otros grupos de personas que informan que conducen con sueño son los trabajadores por turnos, los choferes profesionales y los adultos con hijos en el hogar.

Consejos para evitar conducir con sueño:

1. Dormir suficiente

Reconoce que el sueño es un componente esencial de la salud y duerme las siete u ocho horas cada noche que la mayoría de la gente necesita.

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2. Trata tus trastornos de sueño

Recibe un tratamiento para los trastornos del sueño como el insomnio, la apnea obstructiva del sueño, el síndrome de piernas inquietas y la narcolepsia.

3. Prevén tus horarios

Evita conducir entre las de las 02:00 y las 06:00 horas, cuando la necesidad de dormir es más fuerte. También debes estar consciente de la caída de la tarde. Los accidentes que se deben a la fatiga a menudo se producen entre las 14:00 y las 16:00, durante la caída circadiana del estado de alerta. (Alrededor de la hora de la comida.)

4. El café es tu aliado en emergencias

Aunque la cafeína no es un sustituto para una buena noche de sueño, puede ayudar a manenerte alerta. Así que a menos que sufras de insomnio o tengas una condición médica que aumenta debido a la cafeína, entonces, por todos los medios busca una buena taza de café cuando tengas que manejar y sepas que no estás en tu momento de mayor alerta.

5. Detén el vehículo.

Si tienes síntomas de somnolencia, no pienses que puedes controlar el impulso. Muchos lo intentan con consecuencias fatales para ellos y para sus compañeros de viaje. Busca un lugar seguro e intenta tomar una siesta de entre 10 y 20 minutos. En los estudios se demostró que como resultado de una siesta corta hay un mayor estado de alerta y un mejor rendimiento.

6. Limita el kilometraje

Evita conducir grandes distancia solo, especialmente durante la noche.

7. Toma descansos

La Fundación Nacional estadounidense del Sueño recomienda que tomes un descanso, te bajes del coche a estirar las piernas o sólo te orilles a descansar, cada dos horas si conduces distancias largas.

8. Alerta a los jóvenes

Habla con los jóvenes, y especialmente con tus hijos adolescentes que empiezan a conducir, sobre los peligros de conducir con somnolencia.

El 96% de los encuestados por la Fundación AAA sienten que es «inaceptable» que la gente conduzca mientras le cuesta trabajo mantener los ojos abiertos. Sin embargo, sólo en un estado en Estados Unidos, es ilegal conducir mientras sabes que estás fatigado. Maggie’s Law (La ley de Maggie) se promulgó en Nueva Jersey después de la muerte en 1997 de Maggie McDonnell, una estudiante universitaria que murió cuando un conductor, que admitió que estuvo despierto durante 30 horas seguidas, se estrelló en su automóvil.

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