La ignorancia, la incompetencia y el centralismo nuevamente intentan golpear el empuje, la vitalidad y la alegría de los zulianos.
Sin reconocimiento alguno por la tan verbalizada participación ciudadana, desde Miraflores se nos quiere imponer la obligación de tener “un chip” en cada vehículo para poder ejercer el derecho a tener la gasolina que nos permita movilizarnos y trabajar. También, una ineficiente manera de obligarnos a reducir el consumo, mientras se regala nuestro petróleo al extranjero.
Una decisión o mandato del centralismo que con su aplicación dice acabará con el contrabando fronterizo de ese producto. Esta decisión presupone que todos los zulianos somos contrabandistas. Que quien tiene su carrito para ir a la universidad, al trabajo, visitar las playas, el taxista o autobusero que facilita el transporte público, todos, son contrabandistas. Un absurdo.
Desde las encumbradas y lujosas oficinas de PDVSA ignoran que en nuestro estado circulan más de 700 mil vehículos y que de acuerdo a la logística aplicada para colocar “el chip”, se tardarán, mínimo, tres años en atender todo su mercado automotor. Parece que se nos quisiera castigar sometiéndonos a colas interminables.
Mientras tanto, los pocos y verdaderos contrabandistas, los denominados bachaqueros, andan por la libre, haciendo de las suyas en alianzas perversas y millonarias en los surtidores de PDVSA, porque el contrabando pasa por las alcabalas, por los puentes y ante los ojos de quienes dicen ahora querer impedirlo. Los efectivos de nuestra Fuerza Armada deberían recibir la orden de combatir y acabar con el contrabando, y no la de castigar a los zulianos honestos y trabajadores.
Como Jefe de Gobierno Regional debo ser en extremo responsable: este es un caso grave que afecta y afectará en aspectos críticos el desenvolvimiento de nuestra comunidad zuliana. En el Ministerio de la Defensa y en todos los organismos de inteligencia e investigación se conoce perfectamente quiénes son los contrabandistas de gasolina en esta parte del país. Como prueba, las declaraciones del Jefe de Guarnición Militar de Maracaibo, quien recientemente señaló la relación entre las mafias y algunas comunas monopolizadoras de los servicios de transporte.
Desde Miraflores acabaron con nuestra industria de servicios petroleros, al lago lo tienen abandonado y contaminado, la droga campea en nuestro puerto, se multa a la familia zuliana por su consumo eléctrico, invaden nuestras fincas productivas. Y ahora nos quieren, como ya dije, marcar a los zulianos como reses en un establecimiento militar para poder disponer de gasolina.
Como pueblo pujante, con imaginación, laborioso y con la guía de nuestra Virgen de La Chinita daremos respuesta contundente a este atropello. Lo haremos el próximo 7 de octubre votando por Henrique Capriles Radonski, ya comprometido con el Zulia y Venezuela a derogar el racionamiento de gasolina, eliminar el chip, combatir de verdad el contrabando y terminar con la política de regalar nuestra riqueza al extranjero.
Por: Pablo Pérez / @PabloPerezOf