No necesariamente usted debe saber todo acerca de su tarjeta de crédito, incluso si lleva con ella algunos años, podría sorprenderse con un par de cosas. Las tasas de interés, el cupo y los plazos, no son todo lo que debe saber. Aquí una lista de los detalles que pasan desapercibidos.
1. La tasa de interés no es siempre la misma
Si usted es de los que cree que el banco le está cobrando la misma tasa de interés de cuando empezó a utilizar su tarjeta, pues se equivoca. Los bancos tienen la libertad de cambiar la tasa de interés de acuerdo a las condiciones del mercado. Es importante que sepa que esas nuevas tasas aplican para las nuevas compras que haga y la ley obliga a las entidades a avisarle en caso de cambio de la misma. Por eso, es importante que no haga caso omiso a las comunicaciones que llegan de su banco, recuerde que no todas le están cobrando, hay muchas que llegan como protección para usted, como consumidor financiero.
Recuerde además, que si se pasa de la fecha límite de pago, la tasa de interés que le cobran por los días de mora, es diferente también y muchas veces alcanza la tasa de usura. En muchos países, es posible no aceptar la nueva tasa y llegar a un acuerdo con el banco para mantenerla, en Colombia aún no se tiene este privilegio.
2. Devoluciones de saldo
Si alguien hace una compra en línea y nunca llega o aparece en su extracto una compra que usted no realizó, las tarjetas de crédito otorgan a los consumidores una protección en donde deben hacer la devolución del dinero, después de haber hecho todos los trámites de devolución con el vendedor y la respectiva investigación sobre la posible clonación o robo de su tarjeta de crédito.
3. Mejor tarjeta con chip
Hay muchos terminales de tarjetas de crédito en el mundo que solo aceptan tarjetas con chip y no de banda magnética. Entonces, es mejor que antes de viajar se asegure que su tarjeta cuente con esta nueva tecnología para que no pase un mal momento sin poder utilizar su dinero en otro país.
4. Tasa fija y tasa variable
El hecho de que su tarjeta de crédito tenga una tasa fija hoy, no quiere decir que siempre lo hará. Así como los emisores son libres de cambiar la tasa de interés, también pueden cambiar el modo de cálculo. Sin embargo, según la ley de protección al consumidor financiero, el banco debe avisarle del cambio antes de que este se haga efectivo.
5. Saldo de compras y de avances
Algunas tarjetas tienen límite para la compra de productos en tiendas de comercio y asignan otro para los avances en efectivo. Por lo tanto, antes de hacer sus transacciones cerciórese de que cuentas con los recursos suficientes para no generar gastos extras.
Una estrategia para mantener su cupo de crédito controlado es revisar su extracto con detenimiento y utilizar los canales electrónicos que ponen los bancos a su disposición para estar informado de su estado de cuenta.
6. Para pagos en línea
Realizar el pago de la cuota de su tarjeta de crédito en la sucursal bancaria tiene una ventaja, y es que garantiza que el pago se acreditará el mismo día. Aunque no es tan cómoda como los pagos electrónicos, si usted es de los que se espera a realizar el pago hasta el último día, pues si es mejor que lo haga. De lo contrario, los pagos en el cajero automático, por Internet y por Banca Móvil, además de ser más cómodos, son muy eficientes, siempre y cuando siga todas las recomendaciones de su entidad para hacerlas.
7. Si el extracto llega tarde, igual tiene que pagar
No recibir el extracto de su tarjeta de crédito no lo exonera de tener que realizar el pago en la fecha límite. Por eso, es muy importante que en el momento en que reciba una se cerciore y pregunte cuál es el día del corte y la fecha límite de pago, para estar pendiente y realizar el pago. De no hacerlo, tendrá que aceptar el cargo por días de mora y hasta un reporte negativo en las centrales de riesgo.
8. Reporte a las centrales de riesgo
Cuando usted deja de pagar 60 días su tarjeta de crédito, el banco debe informarle que será reportado a las centrales de riesgo, esto en caso de que sea un error usted pueda dirigirse a su entidad y evitar que se haga un reporte que no es correcto.