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La lactancia materna no sólo es buena para los bebés, sino que ayuda a mantener la salud de las madres: Uno de los principales beneficios que encuentran las progenitoras al lactar a sus hijos es que reducen el riesgo de padecer cáncer de mama.
Varios estudios han desarrollado esta teoría. Por un lado, la revista Obstetrics & Gynecology reveló que, si las nuevas mamás siguen la duración recomendada de la lactancia materna (12 meses), habría 5.000 casos menos de cáncer de mama entre las mujeres por año, mientras que la Academia de Pediatría recomendó que los bebés fueran amamantados exclusivamente con leche materna durante los primeros seis meses de su vida para luego ser solo un complemento durante, al menos, un año.
La leche materna se extiende en nutrientes mucho más allá que la nutrición básica, lo que resulta en beneficios para la salud de los bebés: evita las infecciones respiratorias y gastrointestinales, principalmente.
Puesto que hay pocas cosas que una mujer puede hacer para reducir su riesgo de cáncer de mama además de tener una rutina de ejercicios, mantener un peso saludable y limitar el alcohol, la lactancia materna es un paso proactivo adicional para las nuevas mamás.
En este espíritu de toma de conciencia sobre el cáncer de mama, he aquí algunos consejos para las madres que comienzan a lactar:
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Un día a la vez. Existe una curva de aprendizaje en la lactancia, pero después de unas semanas a la mayoría de las mujeres les resulta natural.
¿Tienes problemas? Busca ayuda. Pregúntale a tu médico qué está pasando y cómo puedes solventar el problema.
Si eres tímida, considera comprar una cubierta de enfermería. Hay muchas marcas y modelos para adaptarse a tu gusto.
Si experimentas dolor, consulta con un especialista en lactancia. Él se asegurará de que tu bebé tenga la posición adecuada para una lactancia sin dolor.
[Fuente: inspirulina.com]