La presidenta, Cristina Fernández, reinicia el lunes sus actividades oficiales luego de la cirugía de cráneo realizada seis semanas atrás, con algunas reuniones con funcionarios y en medio de la expectativa generalizada sobre el espíritu con el cual retomará el poder y las medidas que llevará a cabo.
Fernández permanecerá durante el día en la residencia presidencial de Olivos, en las afueras de Buenos Aires, donde recibirá al secretario general de la Presidencia Oscar Parrilli, al jefe de Gabinete Juan Manuel Abal Medina y al vicepresidente Amado Boudou, quien reemplazó a la gobernante durante su convalecencia.
La mandataria del peronismo de centroizquierda, llamó el domingo por la noche a la candidata socialista Michelle Bachelet para felicitarla por su triunfo en la primera vuelta de las elecciones generales en Chile, informó la agencia oficial de noticias Télam.
Fernández estuvo seis semanas de reposo medico a raíz de la la intervención quirúrgica a la que fue sometida el 8 de octubre para drenarle un hematoma craneal que se le produjo por un golpe en la cabeza.
Si bien el alta médica fue firmada el 9 de noviembre, por recomendación del equipo de médicos que la atendió, Fernández permaneció una semana más en reposo en Olivos. El retorno de la mandataria a sus actividades será paulatino ya que aún continúa vigente la prohibición de que viaje en avión o helicóptero.
Seguidores de la mandataria se notaron felices en las redes sociales por el regreso de la dirigente peronista, reelegida a fines de 2011 y quien deberá dejar el poder en dos años. Imágenes de la gobernante con el lema «Vuelve CFK» fueron difundidas por militantes del oficialismo.
Algunos mensajes de apoyo llevaron adjunta una encuesta del Centro de Estudios de Opinión Pública difundida la víspera en el diario Página 12, afín al gobierno, que señala que 58,2% de los encuestados tiene una imagen positiva de Fernández. El estudio, realizado la semana pasada y para el cual se entrevistaron por vía telefónica a 1.000 personas de todo el país, señaló que en un año la imagen positiva de la mandataria subió ocho puntos y que esa mejora se hizo más notoria después de las primarias de agosto con vistas a las elecciones legislativas que tuvieron lugar dos meses después y, luego, durante su convalecencia.
Fernández permaneció en absoluto silencio desde que fue operada y ni siquiera se comunicó por Twitter, al que es aficionada. No emitió ninguna opinión sobre la derrota electoral que sufrió el oficialismo en las legislativas del 27 de octubre, que según varios analistas pronostican el principio del fin del kirchnerismo, el movimiento que fundó en 2003 Néstor Kirchner, fallecido marido y antecesor de la gobernante, y que ella prolongó desde 2007.
En tanto, una encuesta de Management & Fit realizada por teléfono y de forma presencial a 2.000 personas de todo el país del 11 al 17 de octubre señaló que la percepción positiva de la gestión presidencial había mejorado levemente respecto de septiembre situándose en 44,4%, mientras que la desaprobación había disminuido algo hasta colocarse en 46,5%. Ese mismo sondeo señaló que 43,9% tenía una imagen buena o muy buena de la presidenta, 30% mala y 22,8% regular.
Una de las preguntas que más se hacen los analistas y opositores es si Fernández mantendrá el modelo que ella denomina de inclusión social y que algunos sectores critican por ser «populista», o dará un giro para frenar el déficit fiscal, la inflación y la caída de las reservas del Banco Central. Otras de las grandes preocupaciones de los argentinos es la inseguridad, según todas las encuestas.
A ese respecto, el senador oficialista Aníbal Fernández dijo el lunes al canal Telefe que él no conoce «ni conoce nadie» las medidas que tomaría Fernández los próximos días. «Tanto Néstor (Kirchner) como Cristina (Fernández) han tenido vocación de plantear cosas desde lo personal, nunca lo han llevado a que lo conocieran los medios, lo conocíamos por boca de ellos», aseguró.
Hasta 2015, la mandataria tendrá que enfrentarse a la competencia interna que se producirá el peronismo para sucederla. Fernández no ha señalado por el momento quién sería su representante del kirchnerismo para las presidenciales de 2015.
[Fuente: AP]