El Comando Central de Estados Unidos también informó de la interceptación del «dhow», una embarcación de vela, y señaló que «contrabandeaba un volumen masivo de material explosivo a Yemen, incluidas más de 360.000 libras de fertilizante de urea (utilizado en explosivos) además de perclorato de amonio (utilizado en combustible para misiles balísticos)» Asi lo destaca elnacional.com
La Marina estadounidense ha interceptado en el golfo de Omán un barco pesquero sin bandera procedente de Irán y destino a Yemen cargado de compuestos químicos que se usan como precursores para explosivos y misiles, informó este martes un comunicado de la Quinta Flota Naval de Estados Unidos, con sede en Baréin.
Según la nota, el barco fue interceptado el pasado día 8 en el golfo de Omán, a la entrada del golfo Pérsico, y «contrabandeaba ayuda letal, incluida una gran cantidad de material explosivo de Irán a Yemen».
Al inspeccionarlo, «la Quinta Flota descubrió más de 70 toneladas de perclorato de amonio, un poderoso oxidante comúnmente utilizado para fabricar combustible para cohetes y misiles, así como explosivos», explicó.
La nota destacó que las fuerzas navales estadounidenses seguirán vigilando la transferencia de «ayuda letal desde Irán» a Yemen, al considerar que es «irresponsable, peligrosa y conduce a la violencia y la inestabilidad en todo Oriente Medio».
El Comando Central de Estados Unidos también informó de la interceptación del «dhow», una embarcación de vela, y señaló que «contrabandeaba un volumen masivo de material explosivo a Yemen, incluidas más de 360.000 libras de fertilizante de urea (utilizado en explosivos) además de perclorato de amonio (utilizado en combustible para misiles balísticos)».
Según la nota del CENTCOM, las fuerzas navales del país norteamericano «hundieron el barco y transfirieron su tripulación yemení a las autoridades civiles».
La Quinta Flota norteamericana, con sede en las aguas del pequeño reino insular de Baréin, está encargada de vigilar Oriente Medio, el golfo Pérsico y Asia Central.
Varios países árabes del golfo, vecinos de Irán y tradicionalmente aliados de Estados Unidos, han acusado repetidamente a Irán de apoyar con material militar, en especial misiles y drones, a los rebeldes chiíes hutíes yemeníes que se alzaron en armas en 2014 y controlaron la capital yemení, Saná, y otras áreas del norte y centro del país.
Instalaciones vitales en Arabia Saudí y Emiratos Árabes Unidos, países que integran la coalición árabe que interviene en el Yemen desde 2015 en favor del gobierno internacionalmente reconocido, han sido blanco de numerosos ataques hutíes con misiles y drones que intensificaron a principios de 2022.