En un mundo de lujosas casas, impactantes carros, valiosísimas joyas y caros vestidos couture, la vida gourmet es parte vital de una existencia de lujo. En ella, los grandes chefs internacionales determinan qué es lo último entre ¡lo mejor de lo mejor!
Una cena en el restaurante japonés Masa, de Nueva York, por ejemplo, cuesta 1,600 dólares (el menú básico es de 450 dólares por persona, sin vino ni propinas) y en algunos lugares famosos que están desde Las Vegas hasta Hong Kong y Tokio ofrecen platos que cuestan miles de dólares. Una Lobster Frittata (de langosta) y 300 gramos (10 onzas) de caviar en un desayuno en el Norma de Le Parker Meridien, de Nueva York, tiene un valor de mil dólares.
El postre The Frrrozen Haute Chocolate, de casi 18 mil dólares, en el Serendipity 3, de Nueva York, tiene 28 tipos de cocoa y 5 gramos de oro comestible de 23 quilates, y lo sirven en una copa de oro con piedras preciosas. El Golden Opulence Sundae cuesta solo mil dólares y también tiene oro comestible.
En el restaurante Kai, de Londres, la sopa Buddha Jumps Over the Wall cuesta 250 dólares, y lleva aleta de tiburón y jamón de Hunan, y hay que ordenarla con cinco días de anticipación. The Golden Phoenix Cupcake, del Bloomsbury’s Cafe, en Dubái, cuesta mil dólares, incluyendo el estuche y las hojas de oro. En Nino’s, de Nueva York, las pizzas con trufas y caviar se pueden comer por mil dólares.
En el Bombai Brasserie, de Londres, el Samundari Khazana curry de mariscos con caviar Beluga y trufas tiene un valor de 3 mil dólares. El tasting menu de L’Arpége, de París, con tres estrellas Michelin, cuesta 450 dólares, sin vino ni propinas. El Sushi del Oriente, de Karat Chef, del chef Araneta, en Manila, está envuelto en hojas de oro, polvo de diamantes y cuesta 2,200 dólares. El hotel Mandalay Bay, en Las Vegas, presenta la hamburguesa FleurBurger 5000, de carne wagyu, foie gras y trufas, por 5 mil dólares.
En Tokio, el superfamoso Sushi Course, en el Sushi Jiro (¡situado en una parada de metro y con solo 10 asientos!) cuesta 366 dólares. Fue creado por el propio Jiro, considerado un héroe gourmet después del documental que se hizo sobre él, que fue titulado Jiro Dreams of Sushi.
La tendencia a la extravagancia la inició hace varios años el chef Daniel Boulud en Nueva York, al ofrecer en el DB Bis tro Moderne su lujosa hamburguesa Double Truffled Burger, con trufas y foie gras, por 150 dólares. Y todo esto sin contar una nueva moda de ofrecer tragos y postres que esconden anillos de compromiso de diamantes y se sirven en copas con brillantes Swarovski, como los del bar del hotel Algonquin, en Nueva York, cuyo Martini, con un gran diamante dentro, cuesta 10 mil dólares, y el coctel Diamonds are Forever (1,300 dólares), del bar del hotel Burj Al Arab, en Dubái. Las fresas con crema y diamante rosado de 7 quilates, del Arnaud’s, de Nueva Orleans, puedes disfrutarlas por 4 millones de dólares, aunque el costo varía según el tipo y el tamaño del diamante.
[Fuente: vanidades.com]