Heiber Barreto: Chavistas están preocupados de ser víctimas de la censura que aplicaron

Heiber Barreto, politólogo y chavista crítico, cuestiona la estrategia del presidente Nicolás Maduro y del Alto Mando Político de dirigir su propuesta a conquistar a los opositores y a lo que denomina «el chavismo blando», y que en el interín, dice, ha acabado con al menos 10 programas de radio y TV de leales rojos pero críticos a fallas de la revolución.

Barreto, conductor de Golpe de Timón, programa de los lunes en Aporrea y que también conduce Nicmer Evans, recuerda que él mismo ha sufrido las consecuencias de esa nueva política de la era poschávez. Su programa Cara o Sello que trasmitía Canal I fue sacado del aire «por presiones de arriba, presiones gubernamentales» y señala que no es el único que se ha visto afectado, 120 días después de que Maduro tomara el poder.

«Es preocupante, dos programas de Vladimir Acosta están fuera de RNV; dos programas de Nicmer Evans, Cara o Sello y el programa de radio; el programa de Alberto Nolia, el programa de Toby Valderrama con un Grano de Maíz; el mismo programa de Mario Silva y otros tantos en el interior que, aunque no llevamos la cuenta, sabemos que han salido del aire.

Aquí se instaló muy rápidamente con Maduro una estrategia de buscar a la oposición y al chavismo blando, y al Gobierno le pareció necesario bajar los decibeles a la polarización mediática pero dejando por fuera programas críticos hacia adentro. Se censuran las opiniones críticas a lo interno del Gobierno como ocurre también en la oposición. Los críticos de cada bando son censurados. Maduro tiene 120 días en el Gobierno y al menos he sabido de 10 programas de radio y TV del chavismo que han sido censurados», indica.

El politólogo reitera que el elemento común de los programas fuera de VTV y RNV «es que todos eran críticos, pero críticos con lealtad a la revolución, pero también leales a la conciencia y a la veracidad. Al señalar las fallas, Maduro no pudo aguantarlas y mira lo que ocurre con los programas».

Recuerda que en días pasados estaba en la llamada plaza de Lina Ron y unos pensionados reclamaban con un megáfono que les habían cerrado un programa que tenían en RNV después de 11 años. «Uno más de los que han cerrado».

[Fuente: ElUniversal.com]