El andar en la política es duro y contradictorio, los sueños quieres hacerlos realidad en beneficio del colectivo, sin embargo consigues piedras de tranca corruptas que ponen un tanto difícil los objetivos deseados; esta brevísima reflexión la hago, luego de recibir el pronunciamiento del Instituto de Patrimonio Cultural (IPC) producto de la inspección realizada por las Arquitectas Mariela Cavalieri y Anais Giménez a la Iglesia San Antonio de Padua en Clarines sobre los trabajos de restauración ejecutados el año pasado por el gobierno a través de la empresa carbuen c.a., donde dejan expresa constancia que la obra carece de calidad, no se ejecutó con personal calificado, y además que las acciones inadecuadas e improvisadas ocasionan daños severos a esta joya arquitectónica colonial.
Este año comienzan los cambios de dirección política en Venezuela y en este municipio Manuel Ezequiel Bruzual de Anzoátegui, donde aspiro ser el próximo alcalde en el nombre de Dios, más que un programa de gobierno armamos una estrategia para alcanzar el progreso, y dentro de esas líneas de acción, está precisamente la explotación del turismo para fomentar empleos dignos, en dos grandes vertientes, por una parte el turismo agroecológico que tendrá su red de posaderos en las parroquias Sabana de Uchire y Guanape y en más de 30 caseríos en su primera etapa y el turismo Colonial en Clarines que ya cuenta con un casco central de calles empedradas, muchas fachadas y construcciones de la época y por su puesto la majestuosa Iglesia con 260 años de historia. Siempre hemos dicho que para atraer turistas a nuestros pueblos hay que hacer una campaña de mercadeo con sus atractivos y entre otras cosas debemos lograr que todo el tendido eléctrico en el casco colonial sea enterrado y solo colocar posteaduras tipo faroles, incentivar el proyecto de fachadas coloniales a quienes no las tienen y lograr a través del IPC el programa preventivo, predictivo y correctivo de la Iglesia, es por eso que cuando anunciaron e iniciaron los trabajos de restauración emitimos una felicitación al gobierno, haciendo la salvedad que la ejecución fuese supervisada por los expertos en la materia.
La alegría duró poco, como es común, se apareció la “empresa” contratista, el alboroto de desempleados por conseguir un chance laboral y sin planificación comenzaron a despegar tejas como locos, muchos vecinos, la hermandades que hacen vida dentro de la Parroquia y obviamente de las damas Católicas con la excelente vocería de la Lic. Aura Sanez hicieron reiterados llamados a la institución que emitía el recurso económico y supuestamente técnico, pero hicieron caso omiso, y en medio del inclemente invierno seguían levantando el techo deteriorado, pero peor fue el remedio que la enfermedad, ya que cuando colocaron el nuevo tejado, filtraba cantaros de agua más que el anterior.
En 1965 se realizó una restauración, ya que el Templo había sufrido daños severos por las guerras del siglo XIX, el Arquitecto Paolo Gasparini encargado de la obra en ese momento, manifestó que la Iglesia de Clarines es el mejor ejemplar de los únicos tres templos de diseño cruciforme en el país (los otros son el de San Miguel de Boconó y la capilla de San Clemente en Coro). Posterior a esto se hicieron un par de intervenciones a las naves de techo que siempre al igual que esta de 2010, arrojó como resultado que en las anteriores se utilizaron materiales inadecuados, madera podrida de encofrado y además corroída por las plagas, es decir la corruptela imperante no es nueva, los forajidos se cobijan hasta en el manto de la Iglesia para obtener grandes dividendos.
Agradecemos al pronunciamiento sincero del IPC y su aporte para frenar que los empíricos contratistas y los gobernantes chantajistas sigan cobrando peajes por las obras del Estado, este miércoles consignamos el informe en la fiscalía V Contra La Corrupción, a los fines se sancione de forma ejemplarizante a los responsables de la empresa y a los sinvergüenzas inspectores de Anzoátegui, de la alcaldía y del mismísimo Colegio de Ingenieros de Venezuela, en ese documento queda claramente plasmado por los expertos autorizado en la materia, el desfalco de los más de mil millones de bolívares puestos en manos irresponsables.
Pero definitivamente no hay nada nuevo en el accionar de estos gobiernos de pillos, que se puede esperar de un alcalde de Bruzual que permite alegremente que se roben los dineros destinados a la adquisición de ambulancias, que tiene la osadía de haber cancelado cientos de millones de bolívares para la compra de instrumentos pediátricos y de quirófanos para el hospital y después de 6 años aun no los entregan completamente, menos se puede esperar de un Gobernador Tarek, que sabe que el quirófano del hospital lleva 13 años en construcción y el avance no corresponde al realero que se ha malgastado, mientras se sigue muriendo la gente por falta de las intervenciones quirúrgicas, no podemos esperar nada bueno de una Covinea que cancelo miles de millones a la empresa Orgar 33 para rehabilitar las vías de Sabana de Uchire, Herrera-Callao y Guanapito-Crucero de Maracual y las dejo todas a media asta, menos podíamos esperar que estos malandros respetaran la casa de DIOS, que a fin de cuentas los perdonara, pero la justicia los sancionará.
Emilio Guzmán Rojas
Twitter: @emilio_guzman