Ya hace un mes desde que Facebook se empezó a cotizar en la bolsa de valores, y la historia no ha sido del todo feliz para la red social. Al descenso sostenido en el precio de las acciones, se suman algunas demandas que ha recibido el propio Mark Zuckerberg por -según las acusaciones- haber ocultada información privilegiada acerca de la (sobre)valoración de su empresa.
Pero en Facebook casi como se que se lavan las manos y apuntan a extraños como los culpables de todo el problema. Específicamente, los dardos de la compañía van dirigidos hacia el Nasdaq, ya que una supuesta falla en su sistema de gestión causó el caos el mismo día que se abrió a la bolsa, retrasando esa apertura y generando confusión entre los inversionistas que estaban prestos a adquirir paquetes accionarios, pero que se toparon con numerosos problemas a la hora de hacer efectivas sus compras.
Lo curioso del caso es que Nasdaq efectivamente reconoció la situación y salió a ofrecer disculpas públicas pasados unos días, pero desde Facebook se dijo que eso fue incluso peor para sus fines. Esto porque, una vez reconocido el problema tecnológico, muchos inversionistas salieron en masa a vender las acciones de Facebook, lo que otra vez causó que el precio de estas se fuera hacia abajo en picada. Y todavía sigue sin recuperarse.
Actualmente, en Facebook están bien preocupados lidiando con todas las demandas que les están cayendo por su desastrosa apertura a la bolsa de valores, como bien podría calificarse a estas alturas. Por lo mismo, redirigir el foco hacia el Nasdaq y sus fallas es una forma de defensa, aún cuando desde la compañía insisten en que nada “ilegal o incorrecto se llevó a cabo durante el proceso”, desestimando los cargos. Por supuesto, la vía judicial y el tiempo darán o quitarán razones a los demandantes o demandados.
Fayer Wayer – Raúl Estrada