Esta es la carrea más larga, importante y lenta de la vida del siete veces campeón de Fórmula 1 Michael Schumacher.
En diciembre su cabeza se dio contra una piedra cuando estaba esquiando fuera de pista en los Alpes franceses. Amante de la velocidad, este consagrado piloto no era un amateur en la nieve.
En los cerca de cuatro meses que lleva ingresado en el Hospital Grenoble, en Francia, el mundo ha ido siguiendo su lenta pero aparentemente progresiva recuperación. Ahora se sabe que, meses después de empezar a despertarlo del coma, el piloto alemán tiene «momentos de conciencia».
Pero, ¿qué quiere decir esto? No mucho, según el neurocirujano Peter Hutchinson, profesor de la Universidad de Cambridge y jefe médico del GP de F1 en Gran Bretaña.
«Evaluamos la conciencia de dos formas: la primera es si los ojos están abiertos y la segunda es cuando el paciente responde a órdenes simples «, le explica al programa Health Check de la BBC.
Hibernación
Hay que tener en cuenta que en accidentes graves, como el que tuvo Schumacher, el coma se induce para evitar que la inflamación que se produce en el cerebro mate las células.
Todo está muy apretado, pues el cráneo no le permite vías de alivio. Así que con el coma, el cerebro se pone a hibernar para que funcione al mínimo y alivie esa inflamación.
Esto permite a los doctores aplicar otros tipos de tratamiento que aseguren el flujo de sangre y por ende oxígeno al cerebro.
«Como colocar la cabeza hacia arriba, cambiar los ajustes de la máquina que lo mantiene con vida para que suministre la cantidad deseada de oxígeno y de otro gas muy importante, el dióxido de carbono, que influye en la presión», explica Hutchinson.
«También podemos hacer un drenaje de fluidos a través de las cavidades del cerebro, enfriarlo (hipotermia) o intervenirlo quirúrgicamente para eliminar una parte importante del cráneo que permita aliviar la presión del cerebro».
A la naturaleza
Todo esto ocurre mientras el paciente tiene el coma inducido. Una vez que los niveles de presión vuelven a la normalidad, entonces empieza el proceso de despertarlo.
Si bien el primer paso es eliminarle los sedantes, el segundo es el más crucial, porque se deja que la naturaleza haga su trabajo. Poco a poco y gradualmente el paciente empieza a mostrar señales.
El profesor señala que algunos pacientes se despiertan relativamente rápido y empiezan a obedecer órdenes, que es cuando realizan movimientos controlados. «Pero, tristemente, no todos salen del coma y permanecen inconscientes».
Aquellos que empiezan a mostrar señales de lucidez, lo pueden hacer abriendo los ojos; a mirar y seguir lo que está sucediendo a su alrededor.
Responder a órdenes
«Pero creo que lo fundamental, en términos de recuperación, es cuando el paciente empieza a obedecer órdenes», aclara el experto.
«Es cuando le pedimos que realicen acciones simples como subir el brazo o abrir y cerrar los ojos. Esta es una señal mucho más positiva que sólo los ojos abiertos».
El especialista cuenta que algunos pacientes abren los ojos, pero no reaccionan a lo que le piden.
La familia de Schumacher mantiene un hermetismo sobre los avances del piloto, y sólo de vez en cuando su agente Sabine Kehm ofrece ciertas pistas a los medios, como esta última.
Pistas que si bien pueden ser alentadoras para su afición, «no dicen mucho» a los expertos.
«El tiempo pasa y quizás esto sea una señal de mejoría, pero para nosotros, cuando el paciente empieza a obedecer órdenes es que estamos más motivados», aclara Hutchinson. «Creo que hay un riesgo de que estemos sobre interpretando esta noticia».
[Fuente: bbcmundo.co.uk]