Los empleados de un museo de Manchester no salen de su asombro.
Sospechaban que una estatua del Dios egipcio Osiris se movía sola pero ahora ya lo han verificado y para que todo el mundo se entere han compartido el vídeo que lo demuestra.
La estatua, de 30 centímetros de altura y que data del año 1800 antes de Cristo, se mueve de manera circular tanto de día como de noche y los responsables del museo decidieron poner una cámara para demostrarlo. Al acelerar las imágenes se ve perfectamente el movimiento de la estatua.
¿Cómo se explica?
El físico Brian Cox dice que podría deberse a las vibraciones originadas por el paso de visitantes al museo pero el egiptólogo del propio centro, Campbell Price, dijo a la BBC que el fenómeno podría estar relacionado con las leyendas del antiguo Egipto.
Fuente: Que.es