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Uno de los terribles episodios en la vida de Michael Jackson, al cual tuvo que hacerle frente por más de una década, fueron las constantes acusaciones en su contra sobre diversos abusos sexuales cometidos a menores de edad.
El cantante tuvo que enfrentar a la justicia por este tema en primera instancia en 1993, y cuando parecía que el tema había quedado en el olvido, nuevamente debió acudió a los tribunales a inicios del 2005, luego de que un niño de nombre Gavin Arvizo presentara una demanda en su contra, por el delito de violación.
Tras cinco meses de juicio, las autoridades declararon a Jackson inocente de dicho delito, debido a la faltas de pruebas contundentes que comprobaran que él había cometido la falta.
Todo mundo recuerda la imagen de Jackson saliendo del tribunal de Santa María California, vistiendo una camisa blanca y un traje negro, llevando puestas unas gafas oscuras y sin dirigir palabra alguna a sus fans, quienes lo esperaban ansioso. Aquella actitud demostraba que el artista no estaba nada bien, pues su cuentas bancarias estaban en ceros y debía saldar decenas de deudas millonarias.
El mal estado físico y mental en el que se encontraba Michael, luego de atravesar por este segundo lío legal, puede comprobarse con la imagen revelada recientemente por el portal TMZ. Se trata de la última licencia de conducir que tramitó el intérprete de «Black or White», en donde se le ve un semblante bastante deteriorado.
«En la imagen tomada el 21 de julio de 2005, el artista luce demacrado, con diversas manchas oscuras en su rostro, la mirada perdida, sin brillo y, sobretodo, se nota que a Jackson le cuesta esbozar una pequeña sonrisa».
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Estas conclusiones concuerdan a la perfección con las declaraciones realizadas por su abogado, Thomas Mesereau Jr., el 28 de junio de 2009, tres días después del fallecimiento de la máxima estrella de la música pop.
En aquella ocasión, Mesereau afirmó que las acusaciones de pedofilia y abuso sexual de menores levantadas en contra de Michael «tuvieron consecuencias físicas y emocionales sobre él, las cuales fueron difíciles de borrar».
El abogado dijo que durante ese tiempo, Jackson no podía dormir, perdió peso considerablemente, sus mejillas se hundieron y su piel palideció aún más; incluso, fue a parar en dos ocasiones al hospital para recibir tratamiento.
Por su parte, el sitio Gawker.com hace énfasis respecto al contraste de la licencia antes señalada y la que tramitó el propio Jackson a mediados de los años 80, en donde se le ve feliz, sonriendo; en aquellos años, su carrera se encontraba en plenitud.
Otras identificaciones del cantante, en donde podrás notar el cambio y los altibajos que tuvo a lo largo de su vida.
El gafete que utilizó siendo un niño para ingresar a las instalaciones de Motown Records.
Una de las grandes pasiones de Jackson eran los autos, por ello, de joven se inscribió a un Rally en Malibú.
Copias de sus pasaportes. El primero data de 1997 y el segundo de 1993.
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