Alguien escuchó los pedidos de millones de personas para cortar con la dulzura en Facebook y tener la posibilidad de que algunas cosas “no nos gusten”. No fue justamente la cúpula de la red social sino un emprendimiento privado de nombre Enemy Graph que nos permite criticar a contactos y páginas.
El éxito fue instantáneo. Los que ocuparon los primeros puestos como los más odiados dentro de la red social fueron Crepúsculo (toda la saga), el Insomnio (?), Justin Bieber, el grupo de rock canadiense Nickelback y el racismo. Imagino que será cuestión de tiempo para que FarmVille u otros juegos sociales que insisten demasiado con sus avisos ocupe algún escalón del podio.
Este servicio, que viene a darle un poco de realismo a tanta amistad virtual, funciona a través de una página en la que se pueden agrupar personas, sean amigas o no, y páginas de artistas, empresas o comercios para catalogarlos como “enemigos”.
Dentro de este gran grupo y como muchas veces sucede en la vida real, podemos separarlos en los diferentes niveles de enemistad que tenemos con cada uno de ellos. Podremos tener “enemigos populares”, esos que odiamos pero tendremos pocas chances de decírselo en persona por lo que preferimos agruparnos y sumar odio junto a otras personas, “enemigos de tus amigos” y “disonancia social”, para los casos en que alguno de tus amigos simpatice con una persona o producto que a ti no te gusta tanto.
Dean Terry, profesor de la Universidad de Texas, Estados Unidos, es el creador de Enemy Graph y relata que buscaba desarrollar una “blasfemia de las redes sociales”. A pesar de su entusiasmo inicial no le augura mucho futuro a su proyecto ya que estima que será cuestión de semanas para que la red de Zuckerberg cierre la aplicación.
Terry comenta que cuando vio la lista de “amigos” al crear por primera vez su cuenta en Facebook pensó “¿y dónde está la lista de enemigos?”, tal como nos pudo haber pasado a varios que pensábamos que las redes sociales intentarían reflejar tanto lo bueno como la malo de la vida social de las personas.
Además, no es tan malo ni negativo tener una lista de personas o cosas odiadas. De hecho muchas veces generamos afinidad con otras personas no por nuestros gustos sino por las cosas que odiamos, así que deseamos que Enemy Graph nos ayude a cortar un poco con tantas relaciones edulcoradas.