Un grupo de investigadores ha descubierto un sistema de espionaje a través de cables submarinos, empleado por la armada británica durante la Segunda Guerra Mundial en las inmediaciones del puerto de Haifa, en el norte de Israel.
De acuerdo a un estudio recientemente divulgado por el Instituto Ben-Zvi de Jerusalén, del que da cuenta hoy el diario “Haaretz”, los investigadores llegaron a esa conclusión tras rastrear unos cables que reposaban en el suelo marino en el litoral de Haifa, conocidos desde hace décadas por algunos submarinistas y pescadores.
Los cables estaban cubiertos por varias capas de goma, yute, plomo y acero fueron empleados por los británicos para proteger el puerto.
Además, bajo las capas los expertos encontraron una tira de tela en la que se leía Siemens London, 1940.
La compañía alemana tenía una sucursal en la capital británica desde antes de la guerra y produjo equipamiento de defensa para el ejército británico durante la contienda.
El lugar del hundimiento del submarino italiano, a unos 10 kilómetros de la costa de Haifa y 33 metros de profundidad, era un punto de atracción de submarinistas desde los años 60.
Dos décadas después el arqueólogo submarino israelí Ehud Galili localizó una entrada al cuerpo del submarino y encontró los restos de la tripulación en su interior.
“Me conmocionó porque como israelí sé lo que significa el retorno de los restos de los soldados caídos”, aseguró Galili, quien puso entonces en conocimiento del agregado militar italiano su hallazgo sin encontrar demasiado interés en el asunto, asegura el medio.
Sólo en 1985, después de que se supiera en Italia de la existencia de los huesos de los 50 tripulantes, lo que provocó enorme revuelo, un barco de la marina italiana se desplazó a la región para recoger los restos del submarino.
Desde entonces, los italianos celebran una ceremonia anual en memoria de los soldados fallecidos, aunque hasta hace poco no se conocieran las circunstancias del hundimiento del submarino por los británicos.
El diario recuerda que en agosto de 1942 los italianos planeaban un ataque al puerto de Haifa, donde se aprovisionaba de combustible del Ejército británico, pero los ingleses lograron descifrar el código empleado por los italianos e interceptaron mensajes entre italianos y alemanes.
Los investigadores encontraron documentos que indican que los británicos no consideraban el puerto de Haifa una máxima prioridad, pero sí prepararon un sistema de cables para cubrirlo en caso de necesidad y fue desplegado antes de que el Scire se aproximara.
El estudio detalla las últimas horas del submarino, el 10 de agosto de 1942, cuando poco después de ser aparentemente detectado por el sistema de espionaje, un comandante de la costa ordena a un escuadrón de artillería prepararse para disparar, y cinco minutos después se informa de que dos rondas han alcanzado el Scire, que deja 50 tripulantes muertos.
Fuente: [elnacional.com]