El mes de agosto trae como gran novedad el cambio de horario en todo Chile, algo que antes sucedía en el mes de octubre. El sábado 13 de agosto habrá que adelantar los relojes en 60 minutos, es decir, de la actual zona horaria UTC-04:00 pasaremos a quedar en UTC-03:00. Así lo reseña BioBioChile.cl:
¿No entendiste bien qué hay que hacer? Para quienes les confunde el cambio de hora tanto como a nosotros, explicamos nuevamente: cuando lleguen las 12 de la noche del sábado 13 de agosto, habrá que cambiar los relojes a las 01:00 horas del domingo 14.
Las zonas horarios antes mencionadas son sólo para Chile continental, ya que en el territorio insular se pasará de UTC-06:00 a UTC-05:00.
Este cambio de hora quedó establecido en el Decreto Nº 253 dictado por el Ministerio del Interior, el cual también definió el cambio de hora realizado en mayo pasado.
Según este decreto, el horario UTC-03:00 será válido en Chile desde el 13 de agosto de 2016, hasta el sábado 13 de mayo de 2017. En esta última fecha corresponderá atrasar los relojes en 60 minutos para volver al horario de invierno.
Recomendaciones para adaptarse más rápido
Tener una hora más de sueño, como lo es a partir de este fin de semana tras volver al horario de invierno, no solo tiene impacto en el diario vivir de las personas, sino que también afecta positivamente a nuestro organismo y reloj biológico, el cual se regula con la luz natural. Así lo reseña ChileVision.cl:
Esto porque como bien sabemos se gana una hora, lo cual presenta muchos beneficios frente a la opción contraria que ocurre en verano, con lo cual la adaptación debería ser bastante rápida.
Quienes no poseen ningún trastorno del sueño no deberían tener complicaciones para enfrentar este «nuevo» huso horario en el país, ya que según la neuróloga Julia Santín, directora del Centro de Sueño de la Red de Salud UC Christus, «en dos o tres días ya deberíamos estar acostumbrados».
Pero la dificultad mayos se presenta para quienes cumplen horarios laborales por turnos o directamente durante la noche, tienen trastornos del sueño como apnea o insomnio crónico o sencillamente funcionan mejor en el horario nocturno.
Aquellas personas podrían demorarse hasta 10 días en adaptarse correctamente. Aunque no es para alarmarse, ya que siguiendo simples consejos no deberían tener mayores problemas.
Y estos pasan por no consumir estimulantes (café, bebidas cola o energéticas) en las últimas horas del día, evitar el alcohol y tabaco en la noche, usar el dormitorio solo para dormir y hacer ejercicio hasta tres horas antes de iniciar el sueño.