¿Cómo se puede explicar que un anciano halla tallado cuatro iglesias en una ladera de la montaña de las tierras altas de Etiopía, todo por su cuenta y solo?
Aba Defar es un hombre movido por su fe en la religión. En un momento en la vida era un hombre de familia y un tejedor de profesión. Pero todo eso cambió con un simple sueño que tuvo en 1959. El Espíritu Santo se le apareció en su sueño, mostrándole una iglesia de montaña excavada en la roca pura. El sueño se repitió en los próximos 30 años, pero nunca supo qué hacer con él. Fue cuando tuvo una visión cuando él finalmente comprendió que la misión de su vida le esperaba en las laderas de una montaña.
En la visión, Aba Defar vio un ermitaño vestido de blanco y sosteniendo una cruz larga y puntiaguda. El ermitaño del mensaje era para celebrar la llegada del ‘Elegido’, con la Cruz de Oro. Y luego, una paloma blanca se posó en su hombro. Después de esta visión, Aba Defar sabía que esto no era más que su vocación al servicio religioso. E él estaba convencido de que la paloma blanca, símbolo del Espíritu Santo, le ordenaba esculpir iglesias en la ladera de la montaña. Después de una segunda visión, se sintió confiado por lo que se dio a la tarea titánica de hacer esas Iglesias.
"Fui instruido por el Espíritu Santo para atrapar a un águila volando", dice. "Es una tarea imposible, pero el águila acaba de aparecer en mis manos". Para este hombre esto era señal de que él sí podría llevar hasta lo imposible. Y así, lo que tiene. Es simplemente alucinante como lo ha hecho sin ayuda de nadie, ha esculpido cuatro iglesias en la roca dura, armado con nada más que simples herramientas de mano. Estas construcciones lo han hecho sufrir, pero su fe lo fortalece y lo mantiene en pie. Supongo Aba Defar es la prueba viviente de que cualquier persona puede lograr cosas increíbles si ponen su mente en ello, ¿no creen?