El hablador es el título de una de las obras de Vargas Llosa, en ella un narrador ambulante de la tribu Machiguenga, trata de contar la historia y mitos de su propia gente, ignorando que más allá otro narrador blanco cuenta la historia a través de un narrador de la tribu Machiguenga.
En los últimos seis meses Radonsky, ha comenzado a parecerse a uno de esos narradores, ha perdido el sentido de la realidad, la imagen de la vida cotidiana. Se ha convertido en una especie de personaje folklórico que dices cosas con el afán de agradar a sus electores, sin importar que sean colosales barbaridades.
La construcción de su nuevo discurso en las cuñas electorales, lo tienen como el hazmerreir. Ramos Allup, afirma que ha empezado a creerse el cuento de que es Hugo Chávez.
J.J “shampoo” Rendón, uno de los autores del afiche de Diosdado, ha ejercido una influencia considerable en el nuevo cambio del candidato opositor. Álvaro Uribe, lo ha convencido de que tiene que ser más agresivo.
Pero nadie le ha asomado que debe ser un poco más comedido y responsable con sus propuestas electorales. En el fondo no les le importa que haga el papel de bobo del pueblo.
Radonsky, lanzó su propuesta de Ley de Misiones para todos, el lema “para todos” indica que quiere ganarse a los electores que no participan del programa. Pero resulta que el target deseado es el de los que están dentro del programa.
La propuesta se hace después que las misiones llevan diez años funcionando, y cuentan incluso con guías metodológicas, y apoyo internacional.
Apoyándose en la industria petrolera, ofrece empleos para todos sacando sus cuentas en una pizarrita acrílica, sin percatarse que anteriormente ofreció reestructurar PDVSA, y rebajar la carga burocrática.
Argumenta que es necesario generar confianza y seguridad a los inversionistas. Sin entender que en un hipotético triunfo electoral de la oposición el 70, continuaría siendo minoría en la Asamblea Nacional, lo cual la obligaría a convocar un referéndum para anticipar elecciones legislativas, una constituyente o cogobernar con el chavismo.
La convocatoria de elecciones anticipadas o la constituyente generarían un fuerte impacto político en el riesgo país, y crearía expectativas negativas en los inversionistas.
Recientemente el candidato opositor propuso generar un millón de empleos para los jóvenes, con la ley del primer empleo. A cambio ofrece librar a los empresarios de su carga tributaria.
No se percata que su ley solo ayuda a los empresarios al favorecerlos con una flexibilización laboral que le garantiza mano de obra barata. En Francia y en toda Europa esta política ha sido cuestionada.
Por último presentó un plan general contra la inseguridad, sin percatarse que en su gobierno, Miranda, se convirtió en uno de los estados más inseguros del país. Sin darse cuenta que su plan de seguridad elaborado por Uribe, sembró de terror, de muerte, y desaparecidos a Colombia.
Al igual que en la novela de Vargas Llosa, Capriles, es un simple reflejo de la realidad que le dibujan el doctor varito, y sus otros asesores.
Se ha convertido en un nuevo tipo de hablador, que hace gala de ese cruce entre español y africanos, un hablador de pendejadas o como diría un amigo el tipo habla dos idiomas “español y paja”.
[Por: Luis Figuera]