Desde hace aproximadamente dos años, el general Vladimir Padrino López, actual Ministro de la Defensa, le ha estado anunciando al país y al mundo los resultados de un plan especial que, según él, pretende librar a Venezuela del terrible flagelo del narcotráfico.
Uno no puede menos que alabar todo plan que pretenda acabar de una buena vez por todas con los narcotraficantes. Como ciudadano, y como venezolano, apoyo todo proyecto, toda iniciativa y todo movimiento que se haga a favor de luchar contra las drogas y contra quienes han hecho de esa actividad un negocio muy lucrativo. Pero una cosa es que uno apoye la lucha contra los narcos, y otra cosa es que nos vean la cara de pendejos.
El general Padrino López es quien siempre informa sobre la “inmovilización” de aeronaves presuntamente utilizadas por el narcotráfico. Pero ojo: algo no cuadra en los anuncios, la mayoría de ellos hechos a través de su cuenta en Twiter, del general Padrino López. Los aviones “derribados” por la Fuerza Armada Nacional Bolivariana tienen tres características que los hacen muy sospechosos: 1) son los únicos aviones en el mundo entero que son derribados y caen a tierra completamente enteros; 2) son los únicos aviones usados por el narcotráfico, a los cuales nunca se les consigue un solo gramo de droga adentro; y 3) son los únicos aviones utilizados por el narcotráfico, que nunca tienen pasajeros ni tripulación, es decir, son aviones “no tripulados”, o mejor dicho: parecen ser “drones” del narcotráfico.
La prensa informó el 12 de diciembre que “dos aviones de matrícula mexicana fueron derribados los días 8 y 9 de diciembre por las Fuerzas Armadas Venezolanas”. Las aeronaves eran un Turbo Commander Rockwell 690B, registro XB-MNX, y un Rockwell Sabreliner 60ELXM, matrícula XB-KLQ.
Los periodistas mexicanos informaron que los dos aviones aparecieron solos. No hay reportes sobre la suerte de los tripulantes. Según el portal Ascend Flightglobal Consultancy el Rockwell Sabreliner 60 XB-KLQ, está registrado a nombre de José Mauro Canaan Castro. Excelsior de México dijo que “la evidencia fotográfica muestra a la aeronave quemada en el piso al sureste de Elorza, estado de Apure, pero no está claro si fue derribada”.
El Sabreliner aterrizó en el aeropuerto Ramón Villeda Morales, de San Pedro Sula, Honduras, donde fue abandonado el 22 de abril de este año por los pilotos: José Javier González García y Jaime Enrique Milchorena Robles, y un pasajero llamado Eugenio Salvador Lara Aranda. Los tres hombres abandonaron Honduras en un vuelo comercial.
No es la primera vez que una aeronave mexicana es “inutilizada” por militares venezolanos. Un Hawker Siddeley DH-125-400A, con matrícula XB-MGM y registrada en Monterrey, Nuevo León, “fue derribada” en territorio venezolano el lunes 4 de noviembre de 2013, cerca de la frontera con Colombia.
El 8 de noviembre de 2013, el secretario general de Gobierno, Jorge López Portillo, informó que en la aeronave viajaban tres hombres y dos mujeres, además del piloto y el copiloto, Carlos Alfredo Chávez Padilla y Mauricio Pérez Rodríguez, quienes tienen su base en Toluca, Estado de México. Los nombres de los pasajeros son: Isaac Pérez Dubond, Susana Bernal Rivas, Adriana Gesabel Cruz Méndez, Sergio David Franco Moga y Manuel Eduardo Rodríguez Benítez.
El 14 de enero de 2014, la Fuerza Armada de Venezuela informó que “interceptó” e “inutilizó” una avioneta modelo Cessna 210 procedente de Centroamérica luego de que sus ocupantes se negaran a acatar “el procedimiento de asistencia”.
El 15 de octubre de 2013, la FANB informó que Cazas F16 “inmovilizaron” dos aviones que violaron espacio aéreo venezolano.
Un reportaje publicado en Panorama, el 29 de julio de 2014, indica que en lo que va del año, hay 25 casos de avionetas inutilizadas e inmovilizadas dadas a conocer por el jefe del Coefanb, Vladimir Padrino López.
Panorama dice que “de los datos hechos públicos por el general Padrino, el 56% ha ocurrido en Apure, 12% en Zulia, Amazonas y Lara, con 8%, y Guárico con 4%. En tres casos la información no especificó en qué estado del país se llevó a cabo la acción en pro de los intereses del país”.
Panorama dice que “En ninguno de los tuits (publicados por Padrino López) se explica qué ocurrió con la tripulación de las aeronaves que aparecen quemadas en cada una de las fotografías hechas públicas por el jefe del Ceofanb. Solo en el caso de una nave derribada en Carora, en el estado Lara, el primero de abril de 2014, los medios de comunicación presumieron de la existencia de una persona fallecida”.
El 21 de octubre de 2013, Padrino López informó que “este año van 13 aeronaves inmovilizadas por medios aéreos, y dos inutilizadas por medios aéreos de la Aviación Militar Bolivariana”. Algunas cifras hablan de entre 30 y 50 aviones “inutilizados” entre 2012 y 2014.
Pero nadie dice que pasó con la tripulación y los pasajeros de esos aparatos. La Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) de México, es la única que ha ofrecido una pista: “de acuerdo con una nota diplomática del gobierno de Venezuela, los ocupantes de la aeronave, “inmovilizada” la abandonaron antes de que fuera “inhabilitada”
Una de dos: o los aviones utilizados por el narcotráfico son “drones” (aviones no tripulados) o los pasajeros y tripulantes corren más rápido que los militares al mando de Padrino López.
Por Gustavo Azocar Alcalá