Dos cazas F-16 estadounidenses despegaron este domingo para seguir de cerca a un avión comercial con destino al aeropuerto JFK de Nueva York, pero no hubo ningún indicio de amenaza terrorista, informaron fuentes oficiales.
"Tuvimos dos F-16 que siguieron de cerca el avión comercial hasta que aterrizó sano y salvo en el JFK", dijo Jamie Graybeal, portavoz del Comando de Defensa Aeroespacial de Norteamérica, quien sin embargo no especificó la razón por la que se ordenó volar a las aeronaves.
El incidente, que tuvo lugar en medio de los temores que rodean al décimo aniversario de los atentados del 11 de septiembre, ocurrió alrededor de las 15H00 hora local (19H00 GMT).
Un funcionario de Defensa que pidió mantener el anonimato le restó importancia al incidente. "No hay indicios de un ataque terrorista", admitió a la AFP.
Algunos medios de comunicación estadounidense informaron de que tres pasajeros se habían encerrado en el baño del avión, lo que pudo haber despertado sospechas en un día en el que las autoridades de ese país están en alerta ante un potencial ataque terrorista con motivo del aniversario por los atentados del 11 de septiembre.