Hombres y mujeres no se vuelven adictos de la misma forma ni tampoco a las mismas cosas, tal y como sugiere un estudio publicado en Frontiers in Neuroendocrinology por parte de un equipo de investigación italiano liderado por Liana Fattore.
Por ejemplo, las mujeres serían más propensas a abusar de drogas legales, como las prescritas por un médico (tranquilizantes), mientras que los hombres lo hacen sobre las drogas ilegales (cocaína o heroína). Las mujeres, en consecuencia, serían más vulnerables a todas las drogas de abuso, y una razón para ello podría estribar en sus hormonas sexuales, el estrógeno en particular.
Pero un adicto no solo se caracteriza por el abuso de sustancias, sino que también pueden producirse adicciones conductuales, como la adicción a la comida, al ejercicio físico o a Internet. Para la comida, las mujeres serían más propensas que los hombres, sobre todo en relación al chocolate. Las mujeres cuentan sentirse más ansiosas, tensas y deprimidas cuando se les prohíbe hacer deporte, así que también desarrollan mayor adicción al deporte que los hombres.
En lo tocante a Internet, el hombre gana por goleada a la mujer: la prevalencia de adicción a Internet es mayor en hombres que en mujeres, aunque no hay datos concluyentes en el papel de los factores de riesgo. En el comportamiento sexual compulsivo, parece que éste es más frecuente en hombres que en mujeres, aunque aún hay pocos estudios sobre ello. Y en la adicción al juego, ellas suelen tener más problemas con juegos como el bingo y ellos, con el poker.
Fuente [Xatacaciencia.com]