Investigadores japoneses han desarrollado un sistema que permite visualizar el combustible fundido en el interior de los reactores de la accidentada central nuclear de Fukushima, una ayuda clave para que pueda ser retirado y la planta desmantelada.
El método -que registra las variaciones que muestra una partícula subatómica al entrar en contacto con el combustible- fue utilizado desde el exterior de la planta nuclear de Tokai, situada en la prefectura de Ibaraki (centro), y permitió al equipo elaborar una imagen del uranio en el interior de sus unidades de fisión.
El sistema puede ayudar a visualizar el estado en el que se encuentra el combustible en el interior de los tres reactores que estaban operativos cuando el terremoto y tsunami de 2011 golpearon la central, algo que de momento es imposible debido a que la altísima radiación hace inaccesibles esas instalaciones.
La retirada del uranio y el plutonio del interior de estos reactores es la parte más delicada del complejo proceso de desmantelamiento de la central, que llevará entre tres y cuatro décadas y requerirá del desarrollo y empleo de tecnologías aún no existentes.
La prueba, que concluyó el pasado diciembre, empleó tres aparatos para detectar la presencia en el aire de una partícula conocida como muon (que se genera cuando partículas subatómicas procedentes del espacio exterior entran en contacto con la atmósfera terrestre) y como ésta modifica su trayectoria al tocar el combustible.
El equipo está compuesto por investigadores de la Universidad Metropolitana de Tokio y del High Energy Accelerator Research Organization, un laboratorio nipón especializado en física de partículas.
«El sistema de medición puede ser instalado fácilmente. Estamos listos para usarlo en la planta de Fukushima Daiichi si Tokyo Electric Power (dueña de la central) tiene la voluntad de cooperar», explicó hoy Hidekazu Kakuno, profesor de la Universidad Metropolitana de Tokio, a la agencia Kyodo.
[Fuente: EFE]