Dicen que el que nada hace, nada teme. Sin embargo, siempre resulta poco agradable saber que tu actividad en redes y servicios pueda ser monitoreada sin que lo sepas.
Quizás por eso suena un poco tétrico que el Departamento de Justicia de Estados Unidos haya elevado una solicitud al congreso del mismo país para exigir que le otorgue más autoridad para realizar investigaciones accediendo a Correo Electrónico, Twitter, Facebook y otras redes sociales para monitorear su actividad en búsqueda de amenazas. Señala fayerwayer.com
El debate surge en momentos en que en Estados Unidos se comenzará a discutir un cambio en las políticas de uso de correo electrónico, las que datan de 1986 y que hoy resultan algo anacrónicas con la realidad de uso de los servicios, la que busca darle más seguridad a los contenidos de los usuarios y evitar el uso de estas prácticas intrusivas por parte del gobierno estadounidense.
Y mientras múltiples actores abogan por la revisión de normas que permiten acceder a correo electrónico de más de 180 días de antiguedad sólo con un oficio firmado por un fiscal — algo usado de forma indiscriminada por la policía, según agencias pro-privacidad — y con una orden judicial si se trata de mensajes de menos de 180 días, el Gobierno está pidiendo todo lo contrario… Sí, acceso más sencillo al correo electrónico de un sospechoso, y también acceso a sus redes sociales para revisar mensajería privada y todo tipo de actividad generada ahí.
Esto se basa en el actual procedimiento que permite a organismos de seguridad a acceder a un registro de llamadas generadas desde un teléfono en particular sin necesidad de ir ante un juez y conseguir una orden para eso. Tomando eso como base, se interpreta que también podría pasar lo mismo con otros servicios antes mencionados.
Estos poderes solicitados contrastan con lo que buscan diversas organizaciones apoyadas por congresistas, las que han creados propuestas de ley que buscan regular de mejor manera la forma en que las autoridades ingresan a esta información y que han sido resistidas abiertamente por las autoridades de seguridad, las que aseguran que así será más difícil acceder a evidencia para plantear casos contra personas que atenten contra la ley.
La discusión sobre el futuro de la regulación de privacidad para estos servicios sigue hoy en el Congreso, y tendrá como expositores a ejecutivos de las empresas más importantes de la industria, incluyendo a Microsoft, Google y Facebook, compañías que han asegurado que exigen — y seguirán exigiendo — un documento de la corte para ofrecer acceso a estos registros.