Desde mi hora más tierna no he sido como otros fueron, no he percibido como otros vieron (…) Así empieza el famoso poema de Edgar Allan Poe titulado “Alone” (Solo), resumiendo quizá ese espíritu único e incomprendido de uno de los poetas y escritores más admirados, cuyo legado atraviesa los años y generaciones enteras transmitiendo su tristeza, su genialidad y esa combinación entre lo macabro y lo poético a través de sus cuentos ya inolvidables.
Si admiras la obra de Poe sin lugar a dudas sentirás la misma fascinación por al autor de “El pozo y el péndulo” o “El gato negro“, porque la vida de este periodista de Baltimore perfila por sí sola el ejemplo más claro del hombre romántico, de esa figura tejida de luces y oscuridades que alimenta toda leyenda capaz de atravesar los siglos con la misma estela fascinante. Estamos pues seguros de que te encantará saber más cosas de él, así que dejemos que uno de sus cuervos nos guíe por los datos más interesantes de su vida:
Edgar Poe nació en Boston, pero se quedó huérfano a los pocos años, siendo acogido por un matrimonio acaudalado de Richmond, quienes le ofrecieron el apellido Allan, pero la relación con ellos nunca fue particularmente buena, de hecho, jamás lo adoptaron oficialmente.
Cuando era muy joven, realizó una travesía a nado por el río James en Richmond, a contracorriente. 7 kilómetros con el único propósito de imitar a su héroe particular: Lord Byron. Sus compañeros de clase nunca creyeron esta proeza.
El primer amor de Poe fue la madre de un amigo suyo, una tal Mrs. Stanard, una mujer bellísima de unos 30 años de la que quedó fascinado ya con 14 años. Para su desgracia -y su inspiración- falleció al poco tiempo, una tragedia que seguramente le sirvió para escribir el famoso poema “To Helen“.
En 1815 estuvo estudiando en un colegio interno en Irvine (Escocia), escenario donde recibió una estricta y dura educación.
A los 16 años ingresó en la universidad de Virgina, llamando la atención de sus profesores por sus dotes y conocimientos en Literatura Clásica, latín, griego y ciencias. Pero a pesar de sus conocimientos nunca fue un alumno modélico, fue expulsado por deudas, por apostar y por beber. Su entrada en West Point tampoco resultó demasiado gloriosa, su carrera militar nunca fue terminada debido a conducta desafiante y poco ejemplar.
Un año después, a los 17 años, empezó a trabajar en imprentas y periódicos como ayudante, también como periodista. Solía utilizar un pseudónimo: “Henry Le Rennet”.
En 1835 Poe se casó con su prima, Virginia Clemm, de 13 años de edad. Lamentablemente falleció al poco tiempo de tuberculosis, abocando al poeta a una vida errática en la que enfundarse en su propia tristeza. La casa en la que murió Virgina y donde Poe pasó sus últimos años aún puede visitarse, es un bonito y sencillo cottage a las afueras de Nueva York.
Su relación con su padre adoptivo siempre fue tensa y turbulenta, jamás le prestó ayuda cuando tuvo problemas económicos o personales, de hecho, tampoco le dejó nada de herencia cuando éste falleció.
El primer periódico en el que escribió fue el Southern Literary Messenger, un medio donde se popularizaron enormemente sus poemas y sus cuentos, tanto que sus tiradas pasaron de 700 ejemplares a más de 5.000 gracias a Poe.
Su verdadera pasión era la poesía, pero los cuentos eran los que le aportaban el dinero suficiente para mantenerse de modo humilde. Su poema más popular fue “The Raven”, (el Cuervo).
Poe tenía un gran enemigo, Rufus Wilmot Griswold, quien se dedicó desprestigiarlo en vida y sobre todo, tras su muerte. Su principal afición fue extender la fama de Poe como autor maldito, depravado y drogadicto. Estudios y análisis posteriores demostraron que no lo era, Edgar Allan Poe no era drogadicto.
Poe siempre tuvo un gran sueño: editar su propio periódico, uno pequeño y plural que iba a llamarse“The Stylus”. Pero, lamentablemente no pudo llegar a cumplir su deseo.
Murió el 7 de octubre de 1849, en Baltimore. Se dice que estaban celebrando elecciones en la ciudad y que él acompañó a uno de los políticos asistiendo a varios eventos. Apareció una fría mañana de invierno desmayado en un callejón. Y a pesar de que fue llevado al hospital y recibió los afectuosos cuidados de la madre de su joven esposa fallecida, María Clemm, acabó perdiendo la vida cuando apenas contaba cuarenta años de edad. ¿De qué murió? La verdad es que las causas nunca fueron aclaradas, tal vez bebió demasiado, o sufrió un ataque, puede que el Delirium tremens se llevara injustamente a este genio de la prosa y la lírica del que tanto hemos aprendido, quién tanto nos ha asustado e invocado los demonios de nuestra ferviente admiración hacia él.
Fuente: [supercurioso.com]