El vaginismo ocurre por diversas causas, entre ellas porque no se ha producido una lubricación suficiente de la vagina, por contracciones involuntarias de la vagina debido a experiencias sexuales traumáticas o por diferencias estructurales del órgano reproductor femenino que hacen que las relaciones sexuales sean dolorosas y problemáticas.
El mejor consejo para conseguir una relación sexual satisfactoria es crear un clímax previo mediante preliminares, antes de acudir a la penetración en sí, como mero objeto de diversión sexual. Así, lograremos aumentar la excitación y el deseo sexual de la mujer. Lo segundo es asegurarnos de realizar lo que nuestra pareja demande, es decir, si sabemos que le gusta una cosa en concreto (como los masajes sensuales o los besos lentos y apasionados) realizarla con el propósito de lograr que se sienta cómoda.
Tras estos pasos básicos, si tras un periodo de preliminares respetable, la relación sexual se complica, lo mejor siempre será acudir a un profesional médico especializado que indique las causas del problema para eliminarlo y liberarse en la relación sexual y en la vida.