La flora intestinal está constituida por una serie de microorganismosque habitan nuestros intestinos, los cuales lo protegen y mejoran su funcionamiento.
Es sumamente importante que la flora se encuentre equilibrada para la correcta absorción de nutrientes por parte del organismo y la eficiente evacuación de los residuos. Además, colabora en la formación de vitamina K y en la formación de ácidos grasos utilizando la fibra de los alimentos.
Al recibir tratamientos con antibióticos u otros medicamentos, la flora puede verse alterada dificultando los procesos metabólicos. En efecto, los antibióticos eliminan todas las bacterias sin discriminar cuales son buenas o malas para nuestro cuerpo. De esta forma, el intestino puede quedar desprotegido frente a agresiones.
Luego de concluir algún tratamiento con antibióticos es recomendable consumir alimentos con probióticos. Estos actúan como una barrera protectora contra los microorganismos no deseados, y mejoran nuestro sistema inmunológico. Además, estimulan los jugos digestivos para una correcta absorción de los nutrientes. Asimismo, sería provechosa una dieta rica en fibra, con disminución de grasas animales, y reducción del consumo de azúcar.
Si la flora se encuentra muy dañada, su médico le indicará cual sería la mejor manera de solucionarlo.