La retención de líquidos es un problema común en las mujeres. Una vez por mes, a raíz del ciclo menstrual, el cuerpo se dispone en esta situación que puede verse también afectada por nuestra alimentación diaria.
La retención de líquidos te da la sensación de encierro y ahogo en la propia piel, dejándote incómoda, hinchada y hasta de mal humor. Por ello, aprendamos a prevenirla y también a tratarla con trucos y elementos naturales.
Cómo prevenir la retención de líquidos
La retención de líquidos puede deberse bien al tipo de alimentación, al estado del ciclo hormonal, o bien a una condición médica seria. Por ello, ante la detección de retención de líquidos, el primer paso es consultar al médico especialista.
Si la retención de líquidos se debe a los primeros dos factores mencionados, puedes prevenirla o minimizarla haciendo leves cambios en tu rutina diaria. Por ejemplo, permanecer de pie, inactiva o con las manos hacia arriba (o a más altura que los codos) te hace más propensa a la retención de líquidos. Procura bajar las manos y caminar o mover las piernas para evitar la acumulación y la mala sensación.
También, para evitar la retención de líquidos, evita usar ropa demasiado ajustada. Lo mismo vale para el calzado: procura que sea más bien suelto, y no tan alto. Finalmente, intenta estar en actividad; hacer ejercicios e ir a pie a realizar los trámites es de gran ayuda para evitar la retención de líquidos en el cuerpo.
Modificaciones en la alimentación
Contrariamente a lo que se pensaría, el elemento fundamental para evitar la retención de líquidos es el agua. Beber más agua te hace orinarla y eliminarla en mayor caudal, arrastrando consigo toxinas y, paradójicamente, también el exceso de líquidos. Bebe cuanta agua quieras y puedas, hasta 8 vasos diarios (dos litros) si puedes.
En lo que respecta a la alimentación, consume frutas y vegetales frescos, sin cocción, o con cocción mínima en agua. Patatas, batatas, alcachofas (alcauciles), espárragos, hojas verdes, berenjenas, tomates y cuantas frutas prefieras son buenos alimentos para evitar esta molesta condición.
Evita consumir sal en exceso, pues la sal te hace más propensa a la retención de líquidos. También, una dieta rica en proteínas (carnes y granos) es ideal para evitar y tratar este mal.
Procura consumir bebidas y alimentos diuréticos, como té verde, yerba mate, zumos de frutas (sandías, toronjas o pomelos, mejor), y también hortalizas y hierbas como el perejil, el enebro, el pepino y el puerro.
Remedios caseros para evitar la retención de líquidos
Además de lo mencionado, algunos trucos de abuela para la retención de líquidos son los siguientes:
– La infusión de cola de caballo es un diurético natural, muy efectivo en esta condición
– La sopa (caliente o fría) de calabazas te ayuda a eliminar líquidos en un mayor caudal de orina
– El té de camilina es otro buen diurético que te hidrata adecuadamente
– Los compuestos e infusiones de diente de león son un laxante natural que puede ayudarte a eliminar líquidos y aliviar los síntomas de la retención de líquidos.